La paciencia de Víctor Orta ya ha llegado a su fin. El director deportivo del Sevilla está por la labor de dar un vuelco a la plantilla con la imperante necesidad de volver a ser un equipo competente y retornar a zonas nobles. La realidad es que las dos últimas temporadas, el equipo de Nervión ha dejado mucho que desear.
Quien precisamente ha estado presente en los dos últimos años y, como el equipo, también ha brindado más sombras que luces ha sido Marcao. El zaguero brasileño llegó en 2022 con el enorme reto de suplir las salidas de Diego Carlos y de Jules Koundé. Sin embargo, desde el principio tuvo que lidiar con las incesantes lesiones y los 13 millones que se invirtieron por él han terminado siendo en vano.
Y al final, en dos temporadas, sólo ha podido disputar 21 duelos con la carcasa hispalense. Ha tenido algún puntual destello de calidad, como el partido frente al FC Barcelona, pero, en términos generales, ni se ha acercado a cumplir con las expectativas marcadas. Además, su alta ficha supone un gran hándicap para el Sevilla a la hora de acometer fichajes; por eso, Víctor Orta ha dicho basta.
La intención de Víctor Orta con Marcao
Así pues, según el Diario AS, desde los despachos del Sánchez-Pizjuán están valorando seriamente rescindir el contrato de Marcao. Como su vinculación está vigente hasta 2026, el Sevilla debería pagar unos 16 millones de amortización más los dos años restantes en concepto de salarios. Una cifra algo elevada teniendo en cuenta la delicada situación financiera.
Aun así, como decíamos, Víctor Orta quiere liberar masa salarial para poder acometer fichajes competentes y está dispuesto a tomar esta drástica decisión. Por otro lado, el ABC aseguró hace unas semanas que la intención del zaguero era quedarse en Sevilla y reivindicarse. Sin embargo, parece que las intenciones de club y futbolista no son las mismas.
El Galatasaray fue el equipo que descubrió a Marcao en 2019, cuando pagó 4 millones de euros al Chaves portugués. Y allí, en el país otomano, rindió de forma extraordinaria y alcanzó su plenitud futbolística. Sin embargo, desde su llegada a Sevilla, su valor ha ido descendiendo notablemente semana tras semana.
Marcao tiene todavía 28 años y está a tiempo de recuperar su mejor versión, aunque todo apunta a que, si lo logra, será lejos de la capital andaluza.