El Wolverhampton Wanderers, de la mano de Jorge Mendes, quiere dar un golpe de efecto importante en el mercado. Los Wolves se quedaron en mitad de tabla en la pasada Premier League y este año no quieren sufrir tanto. Buscan configurar una plantilla de garantías para que les dé un salto cualitativo al equipo.
En The Molíneux están muy cerca de cerrar las negociaciones oficiales por Jørgen Strand Larsen, el delantero noruego del Real Club Celta de Vigo. El futbolista llegó hace dos temporadas a Balaídos, procedente del Groningen holandés, donde se formó Luis Suárez en Europa, entre otros.
Pronto aterrizará en Wolverhampton
Gary O'Neil espera pronto al delantero del conjunto vigués, que llegaría esta semana a pasar el reconocimiento médico y firmar, según apunta el periodista italiano Matteo Moretto en RELEVO.
El delantero nórdico abandona Vigo por 3+27 millones de euros, con una opción de compra obligatoria para el equipo británico. Los ingleses le duplicarán la ficha al futbolista olívico, y no hubo muchas dudas de parte del atacante de Halden. En los Wolves formará pareja con Matheus Cunha, el delantero brasileño ex del Atlético de Madrid, uno de los jugadores más importantes de los lobos.
Un delantero especial
Strand Larsen es un delantero alto y fuerte, que se destaca principalmente por su estatura y su fortaleza. Es muy rápido y resistente, potente al choque. Un delantero al que le gusta mucho controlar el balón y dominar el juego de espaldas, fino en el uno contra uno y un notable rematador.
Es un jugador que suele colaborar en tareas defensivas, ayudando a sus compañeros, algo muy importante hoy en día. Y más en Inglaterra, donde se juega muchas veces a un ritmo absolutamente vertiginoso. Un delantero versátil, que puede jugar de segunda punta y de banda si fuese necesario.
Con su llegada, los Wolves ganarían un jugador con gol y mucho trabajo, una de las indicaciones de Gary O'Neil. Las negociaciones están en la fase final y esta semana el futbolista viajará a Wolverhampton para finiquitar todo. El noruego deja España tras dos temporadas donde anotó 18 goles en 73 partidos con la camiseta celeste.
Un cambio de aires
El año pasado estuvo más cerca del descenso que de pelear por Europa, y ese es otro de los motivos por los que sale. Su salto a la Premier League le puede llevar al primer plano del panorama futbolístico mundial. Ya enfrentó al Barça (convirtiéndole un gol), Real Madrid y Atlético de Madrid, pero busca algo más.
Un rol de líder, como el que tiene en su selección junto a Erling Haaland, con el que mantiene además una gran relación. Además, para Solbakken, el seleccionador, es un fijo. El pasado mes de marzo, saltó la bomba con unas declaraciones del jugador sobre su salida.
"Aún no he jugado en un buen equipo, el objetivo era ir al Celta para dejarlo donde estoy ahora", apuntó. Fue en declaraciones a la cadena noruega NRK y no fueron bien recibidas por los seguidores del Celta.