Con solo 17 años, Lamine Yamal no para de sorprender al mundo del fútbol y es que a su pronta edad y tras convertirse hace muy poco en campeón de europa siendo el MVP joven del torneo, Lamine vuelve a asombrar a todos los amantes del fútbol en este inicio de temporada.
Su dato más significativo es que lleva ya 4 asistencias en los 4 partidos disputados de Liga hasta el momento, una media de una por partido. La temporada pasada logró nueve y ya va casi por la mitad en tan solo 4 partidos en esta nueva temporada.
Su crecimiento es notorio ya que muchos partidos del año pasado veíamos a un Lamine pegado en banda y en esta temporada vemos a un Yamal más combinativo por dentro, su primera asistencia nace de una jugada por dentro y asistiendo a Lewandowski y su segunda asistencia es una conducción que inicia el propio jugador para luego darle pausa y filtrar un balón medido a Raphinha para que convirtiese el quinto gol y el hat trick en su cuenta particular.
Lamine Yamal, ante su mejor versión
Con tan solo 17 años y con un valor de mercado de más de 100 M de euros, el extremo está recibiendo todo tipo de elogios en el mundo del fútbol, los rivales le temen y se nota cuando se enfrentan a él. Lamine es un jugador que no para de intentarlo y eso desgasta mucho a las defensas rivales que tienen que estar haciendo coberturas permanentes.
Se ha convertido en el jugador diferencial de esta plantilla, el jugador capaz de desatascar un partido ante rivales cerrados con un pase de calidad o una acción mágica de las suyas. Estamos viendo un Lamine muy asociativo y aunque todavía tiene cosas por mejorar como es lógico a su edad, cada vez va progresando más y demostrando lo que puede llegar a ser en unos años.
Su mejor posición en el campo
Aunque Lamine pueda jugar por dentro, su mejor posición es de extremo. Con Xavi, el hombre que lo hizo debutar en el Camp Nou con 15 años frente al Betis, vimos un Lamine pegado a banda e intentando permanentemente el desborde y el 1 vs 1 casi sin ayudas. Este año estamos viendo cómo se mete para dentro y hay un 2 vs 1 contra el lateral cuando Koundé dobla y se suma al ataque.
A Lamine le beneficia jugar con jugadores asociativos como Olmo o Pedri para generar superioridad en mediocampo y generar fútbol de ataque. Es un jugador desequilibrante y eléctrico pero también inteligente cuando hay que darle pausa a la jugada. Lo que más llama la atención a su edad es la buena toma de decisiones que tiene, pocos futbolistas a esa edad son capaces de perder tan pocos balones y jugar como si estuviesen en el patio del colegio.