El último episodio de polémica alrededor de Vinicius Júnior ha suscitado un encendido debate en el mundo del fútbol español. El delantero brasileño del Real Madrid fue expulsado por golpear entre la zona del cuello y el rostro a un contrario, lo que ha dado pie a múltiples interpretaciones sobre el criterio arbitral y la aplicación de la justicia deportiva. Uno de los defensores más fervientes del jugador ha sido el periodista Josep Pedrerol, quien en el programa El Chiringuito ofreció su visión de los hechos.
Pedrerol comenzó lamentando el posible castigo de “cuatro partidos por empujar levemente” y se quejó de que, a su parecer, casos más graves —como entradas con los tacos por delante que podrían ocasionar lesiones— se salden con una simple amarilla y sin mayor sanción posterior. “Nos perdemos, de verdad”, comentaba con cierto hastío. A su juicio, decisiones disciplinarias como esta no harían sino alentar la conducta de quienes emplean tácticas violentas en el terreno de juego: “Cuando salen jugadores con los tacos a lesionar, cero partidos y amarilla”.
En su disertación, Pedrerol no se olvidó de subrayar los errores cometidos por el brasileño a lo largo de la temporada. De hecho, reconoció que Vinicius “se equivoca” y que no debe “caer en provocaciones”. Con esta afirmación, dejó claro que el joven atacante también debe trabajar en su conducta para evitar verse perjudicado en situaciones donde la tensión sobre el campo se dispara: “Vinicius se equivoca. Yo le he criticado, no se puede ir así, cayendo en provocaciones, completamente.”.
Es algo personal
No obstante, el punto crucial del comentario de Pedrerol llegó cuando afirmó que la expulsión del jugador merengue se debió más a su nombre y reputación que al empujón en sí. “Pero hoy me pongo del lado de Vinicius, eh. Le expulsa porque es Vinicius”, sentenció. En otras palabras, el periodista sostiene que el árbitro no habría tomado la misma decisión si se hubiera tratado de un futbolista con un perfil menos mediático. Así, acusa a los colegiados de un sesgo claro contra el brasileño debido a sus constantes titulares, su reputación de jugador polémico y su historial de encontronazos con rivales.
El debate ahora se centra en determinar si la sanción realmente corresponde al acto o si el árbitro castigó la fama de Vinicius y su tendencia a la confrontación. Para algunos, el brasileño es el verdadero responsable de sus penurias, pues suele dejarse llevar por la pasión y el temperamento en el momento menos oportuno. Para otros, es la víctima de un sistema que mira con lupa sus acciones y las juzga con un rasero distinto.
En cualquier caso, las palabras de Pedrerol vienen a alimentar la controversia sobre el foco mediático y disciplinario que hay sobre Vinicius. Con el jugador de baja por sanción, el Real Madrid y su entorno valoran la posibilidad de recurrir, convencidos de que el castigo es desproporcionado. El debate seguirá, y la pelota, por lo pronto, se mantiene en el tejado de la justicia deportiva.