En pleno arranque de la pretemporada, el Barça se enfrenta a una de esas situaciones que pueden cambiar radicalmente el futuro del equipo. El club había preparado los primeros entrenamientos con la idea de evaluar a todos sus jugadores, pero una de las piezas clave en el vestuario, Ter Stegen, no ha saltado al césped en ninguna de las primeras sesiones. La directiva observa la situación con inquietud, sabiendo que cualquier decisión tomada en los próximos días marcará la hoja de ruta en el mercado de fichajes y la planificación de la plantilla.
La realidad es que Marc-André Ter Stegen arrastra molestias en la espalda que han obligado a los médicos del club a frenar cualquier tipo de esfuerzo en esta pretemporada. Según han informado medios como 'Jijantes' y SPORT, el portero alemán está valorando, junto al cuerpo médico, si pasar nuevamente por el quirófano o apostar por un tratamiento conservador. Esta decisión, que se tomará en los próximos días, puede suponer una baja de hasta cuatro meses en caso de operación, lo que dejaría al equipo sin uno de sus pilares hasta bien entrado el curso.
No es la primera vez que Ter Stegen vive un escenario así. En 2023 ya tuvo que ser intervenido por una lesión lumbar que le apartó de los terrenos de juego durante varios meses. Más recientemente, una lesión en la rodilla también le tuvo fuera casi toda la temporada pasada. La repetición de estos problemas médicos genera dudas en la directiva y añade presión a una portería que estaba destinada a cambiar de protagonista.

El golpe para Laporta: De una venta estratégica a una baja de larga duración
El caso de Ter Stegen no solo tiene impacto deportivo, sino también económico y estratégico para el Barça. La directiva, con Joan Laporta al frente, había abierto la puerta a una posible venta del alemán para aliviar la delicada situación financiera del club. El sueldo del guardameta supera los 15 millones brutos anuales y liberarlo habría significado margen para nuevas incorporaciones.
Sin embargo, la lesión y la posible operación complican cualquier movimiento de salida. Los clubes interesados no estarán dispuestos a negociar mientras exista la duda sobre su estado físico y un periodo de baja que podría extenderse hasta diciembre. Así, el Barça se queda sin la posibilidad de un traspaso y Laporta ve cómo se desvanece una de sus principales estrategias para equilibrar las cuentas este verano.
Joan García, la solución en la portería y el posible alivio en el 'Fair Play'
La situación de Ter Stegen cambia el panorama de la portería azulgrana. El fichaje de Joan García, procedente del Espanyol, responde a la necesidad de contar con garantías bajo palos. Si finalmente el alemán es baja de larga duración, el club podría recurrir a no inscribirle en LaLiga, una maniobra ya vista en casos como el de Christensen. Así, la ficha de Ter Stegen no computaría en el límite salarial y la entidad podría inscribir sin problemas a Joan García, resolviendo parte del drama administrativo que arrastraba desde hace semanas.
Además, el debate sobre la titularidad se apaga por completo. Joan García, una apuesta consensuada por el cuerpo técnico y la directiva, será el portero titular en el arranque del campeonato, mientras que la figura de Szczesny como suplente aporta experiencia y fiabilidad. El canterano Diego Kochen, por su parte, tendrá minutos en la gira asiática y será el tercer portero, mientras Iñaki Peña tiene vía libre para buscar destino.
El golpe para el Barça es doble: pierde a un jugador experimentado en un momento clave y ve frustradas sus opciones de traspaso. Para Ter Stegen, la decisión de operarse o no puede marcar también su futuro con la selección alemana. Si pasa por el quirófano, tendría la opción de buscar equipo en invierno, con la vista puesta en lograr la titularidad de Alemania y estar en el Mundial. El club, por su parte, tendrá que rediseñar sus planes en la portería y en la gestión de la plantilla para la temporada 2025-2026.