En el mercado de fichajes de este verano, el FC Barcelona vuelve a centrar buena parte de las miradas, no solo por la expectación habitual, sino por la gestión que se está haciendo con algunos de los jóvenes talentos de la plantilla. El club azulgrana, tras una espléndida campaña, afronta el reto de dar un pasito adelante y de terminar de pulir algunas demarcaciones que demandaban refuerzos de forma evidente. Y, como siempre, para que puedan llegar nuevos jugadores, también deben marcharse otros; y uno de los elegidos para abandonar el barco culé es Pablo Torre.
El interés del Mallorca y la necesidad de dar un salto de calidad
El tuit de Gerard Romero ha sido claro y directo: “El Barça y el Mallorca negocian condiciones para que el mediocampista se pueda incorporar al club balear. Horas decisivas, ganas de cerrar su salida antes del 30". Una frase que resume la situación actual del cántabro, que apenas ha contado con minutos esta temporada a las órdenes de Flick. Con solo 421 minutos en total, ha sido el quinto jugador con menos participación, pero dejando destellos de calidad en los partidos que ha disputado. Torre ha firmado 4 goles y 3 asistencias, datos que demuestran su capacidad para aportar en la parcela ofensiva cuando ha tenido oportunidad.
El Mallorca, por su parte, se ha movido rápido tras la salida de Robert Navarro, una baja que deja huérfana la media punta y obliga al club balear a buscar un perfil creativo. Pablo Ortells, director deportivo del Mallorca, lleva semanas siguiendo de cerca los pasos de Pablo Torre, incluso asistiendo a sus partidos con la Sub-21 durante el Europeo, donde el cántabro fue titular en los primeros duelos. El propio entorno del jugador reconoce que la operación es ideal para ambas partes: el Mallorca reforzaría una posición clave y el Barça garantizaría minutos de calidad para uno de sus proyectos más prometedores.

Opciones de cesión y el futuro azulgrana de Pablo Torre
Aunque la fórmula inicial sobre la mesa es una cesión, en Can Barça no descartan otras vías. El club valora opciones como el traspaso con cláusula de recompra, una maniobra que ya ha utilizado en los últimos años para no perder el control sobre jóvenes valores. La dirección deportiva considera fundamental que Torre dispute una temporada completa en un equipo de Primera con aspiraciones ambiciosas, como el Mallorca de Javier Aguirre, donde podría gozar del protagonismo que no ha tenido en el Camp Nou.
La idea es sencilla: que Pablo Torre crezca en un entorno competitivo, acumule experiencia en la élite y, si cumple las expectativas, regrese en un futuro como una pieza madura para el primer equipo. En el club bermellón encontraría, además, un estilo de juego que potencia a los mediocampistas con llegada, una de las principales virtudes del cántabro.