El joven prodigio del FC Barcelona y de la selección española, Lamine Yamal, concedió una entrevista a El Partidazo de Cope en la que habló con naturalidad sobre su carrera, su presente y sus aspiraciones de futuro. Con apenas 17 años, el delantero se ha convertido en una de las figuras más prometedoras del fútbol europeo..
Una estrella que no se obsesiona con los premios
Preguntado sobre la posibilidad de ganar algún día el Balón de Oro, Lamine sorprendió con una respuesta alejada de la arrogancia que a veces acompaña al éxito prematuro. “Yo no pienso en ganar el Balón de Oro. Pienso en disfrutar, jugar bien y si tiene que llegar, llegará”, afirmó con serenidad.
Lejos de mostrar ansiedad o ambición desmedida, su declaración refleja una filosofía clara: disfrutar del juego, mejorar día a día y confiar en que los premios llegarán como consecuencia del trabajo bien hecho. Su enfoque ha sido aplaudido tanto por aficionados como por expertos, que ven en él un modelo de humildad y constancia.

Duelo con Dembélé y mensaje contundente sobre el Madrid
Durante la entrevista, Lamine también se refirió al enfrentamiento inminente en la UEFA Nations League entre España y Francia, donde se reencontrará en el campo con su excompañero Ousmane Dembélé. “¿El Balón de Oro? Yo se lo daría al mejor del año… pero me lo guardo para mí”, bromeó, dejando entrever su confianza antes del duelo.
Pero sin duda, una de las frases más destacadas fue su respuesta cuando le preguntaron si algún día jugaría en el Real Madrid. “No, es imposible”, contestó con rotundidad. Una declaración que ha provocado un aluvión de reacciones en redes sociales y que refuerza su vínculo emocional con el Barça, el club donde se formó.

Una motivación poco común: TikToks antes de los partidos
El delantero también compartió una anécdota curiosa sobre cómo se motiva antes de los partidos importantes. “Mis amigos me mandan cosas malas por TikTok 20 minutos antes de los partidos, saben que eso me motiva”, explicó. Y recordó cómo un amigo le recordó una frase de Rabiot justo antes del partido contra Francia en la Eurocopa, lo que avivó aún más su espíritu competitivo.
Esa mezcla de juventud, humor y hambre de superación es parte del encanto de Lamine Yamal. Su capacidad para transformar las críticas en motivación lo hace diferente y le permite destacar incluso en los escenarios más exigentes del fútbol internacional.
Un futuro brillante sin prisas
Lamine Yamal no quiere correr antes de tiempo. A pesar del ruido mediático y las altas expectativas, su mensaje es claro: disfruta del fútbol, confía en su trabajo y cree en su entorno. “Si el Balón de Oro tiene que llegar, llegará”, repite con una madurez que desarma a cualquiera.
Con apenas 17 años y una carrera que apenas comienza, Lamine ya se comporta como un líder dentro y fuera del campo. El futuro del Barça y de la selección española parece estar, sin duda, en buenas manos.