Un hombre hablando en un micrófono con el logo del FC Barcelona y un estadio lleno de fondo.

La frase chulesca de Fernando Sanz que se le gira en contra tras el Clásico

Al tertuliano le salió el tiro por la culata

El Clásico del pasado 11 de mayo en Montjuïc no solo fue un festival de goles y emociones, sino también un desmentido rotundo a varios vaticinios lanzados en la previa del encuentro. En especial, el del exfutbolista y tertuliano Fernando Sanz,  cuya predicción sobre el supuesto hundimiento emocional del Barça tras su eliminación europea quedó fulminada en apenas 45 minutos de fútbol.

El FC Barcelona venció al Real Madrid por 4-3 en uno de los partidos más vibrantes de los últimos tiempos. Lo hizo con personalidad, remontando un 0-2 inicial, y situándose a un paso de ganar LaLiga. Pero además, lo hizo como un bloque unido, comprometido, y con varios de sus jóvenes líderes brillando con luz propia. 

Una remontada que vale media Liga

El partido arrancó con el guion más temido por el barcelonismo. Al minuto 3, Mbappé adelantó al Madrid desde el punto de penalti tras una falta de Szczęsny. Diez minutos después, el francés volvió a marcar tras una gran jugada de Vinícius, y el estadio quedó en silencio.

Josep Pedrerol y Jota Jordi
Pedrerol, Jota Jordi y el escudo del Real Madrid | Canva

Pero el Barça no se desmoronó. En lugar de hundirse, reaccionó. Eric García, reconvertido en lateral, descontó de cabeza tras un córner. Luego Lamine Yamal marcó un golazo desde la frontal. Y antes del descanso, Raphinha anotó dos tantos que pusieron el 4-2 en el marcador. En apenas media hora, el equipo de Flick dio una lección de carácter.

En la segunda mitad, Mbappé completó su hat-trick, pero el Barça aguantó la presión. Incluso tuvo más ocasiones y le anularon un gol a Fermín López por mano. Al final, el 4-3 fue suficiente para dejar a los azulgranas con 82 puntos, siete más que el Madrid, a falta de solo tres jornadas. La Liga, prácticamente sentenciada.

Lamine Yamal y el plató de El Chiringuito
Lamine Yamal y el plató del Chiringuito | XCatalunya, Canva

Un Barça que respondió en el campo

El equipo azulgrana no solo brilló en lo futbolístico. Mostró madurez mental, intensidad colectiva y un sentido de propósito pocas veces visto esta temporada. Lamine Yamal fue un puñal por la derecha. Cubarsí, imponente. Raphinha, decisivo. Y Eric García, reivindicado.

En cuanto a cifras, el dominio fue claro: 62% de posesión para el Barça, 23 tiros totales por solo 9 del Madrid, y 10 córners frente a 2. Pese a las críticas por la supuesta falta de solidez, el conjunto culé fue más peligroso, más constante y más solidario. Ni rastro del hundimiento anímico que se auguraba. Ni rastro del “palo” que, según algunos, arrastraba el equipo tras caer en la Champions.

Un Clásico con ruido... y con respuestas

La polémica arbitral, como siempre en estos duelos, no faltó. La mano de Tchouaméni en el área no se sancionó. Se anularon goles en ambos lados. Hubo tensión en cada protesta. Pero más allá del VAR, el foco estuvo en la actitud.

El Barça fue valiente, intenso y combativo. El Madrid, salvo por Mbappé, mostró menos convicción. Flick venció el pulso táctico a Ancelotti, y la grada respondió. Con la victoria, el equipo azulgrana cierra una temporada en la que ha ganado todos los Clásicos del curso: Supercopa, Copa del Rey y dos en LaLiga.

La frase que se volvió en contra

En la previa del partido, Fernando Sanz —exjugador del Real Madrid y analista habitual en tertulias deportivas— lanzó una predicción que ahora resuena con ironía. Refiriéndose al golpe anímico que supuestamente arrastraba el Barça por su eliminación en Champions, dijo lo siguiente:

“El Barcelona notará el palo de su eliminación.”

Nada más lejos de la realidad. El equipo respondió con fútbol, orgullo y cuatro goles. Y Sanz, como tantos otros, tuvo que ver cómo sus palabras quedaban en evidencia en el césped.