El Girona FC quiere volver a soñar. Tras una temporada marcada por la irregularidad, el club catalán se ha propuesto devolver la ilusión a Montilivi con un fichaje que podría marcar un antes y un después. Míchel ya tiene en mente un nombre que podría sacudir el mercado veraniego.
Un proyecto con ambición renovada
El curso actual ha dejado sensaciones agridulces entre los aficionados gerundenses. La falta de contundencia en las áreas, especialmente en ataque, ha pasado factura. Los nuevos delanteros no han rendido al nivel esperado y eso se ha traducido en una alarmante sequía que ha penalizado al Girona en los momentos clave del campeonato.
Míchel ha sido claro en sus declaraciones: el equipo necesita un goleador con experiencia, eficacia y conocimiento del sistema. Alguien que no necesite adaptación, que llegue y rinda. La dirección deportiva ha tomado nota y ha comenzado a mover piezas para lograr un fichaje que entusiasme tanto al cuerpo técnico como a la afición.
Un objetivo claro: reforzar el ataque
En el entorno del club se respira una sensación de urgencia. Los errores del pasado mercado no quieren repetirse. En esa búsqueda de garantías ha surgido un nombre que despierta consenso: un futbolista que ya supo brillar en Montilivi y que podría estar dispuesto a regresar.

El jugador en cuestión no ha terminado de cuajar en su nuevo destino. A pesar de sus estadísticas decentes, su adaptación al nuevo entorno no ha sido la mejor. La relación con su actual club es cordial, pero no exenta de dudas. Su salida no se descarta, especialmente si se presenta una opción atractiva tanto deportiva como económicamente.
Un fichaje complejo, pero no imposible
El principal obstáculo es, como casi siempre, el económico. El club interesado en traer de vuelta a este delantero no puede competir en términos de salario o traspaso con otras entidades más poderosas. Sin embargo, confían en el factor emocional y en la experiencia pasada del futbolista en Girona como claves para seducirlo.

El club de procedencia está abierto a negociar. Necesita liberar masa salarial y hacer hueco en la plantilla. Saben que el jugador no está completamente satisfecho y que una salida podría ser beneficiosa para todas las partes. No será una operación sencilla, pero tampoco es una quimera.
Montilivi, listo para recibirlo
Los aficionados del Girona no han olvidado lo que este jugador significó para ellos. Fue el máximo goleador de LaLiga hace apenas una temporada, un ídolo en Montilivi, un referente en el campo y fuera de él. Su marcha dejó un vacío difícil de llenar, pero su regreso se vería como una oportunidad para reencontrarse con su mejor versión.
En el vestuario también sería recibido con los brazos abiertos. Míchel confía plenamente en su capacidad y liderazgo. El entrenador cree que su vuelta podría ser el impulso que el equipo necesita para volver a competir al más alto nivel.
La gran sorpresa del verano
Aunque el club no ha confirmado oficialmente ningún movimiento, las conversaciones informales ya han comenzado. Todo depende ahora de la voluntad del jugador y de la flexibilidad del club vendedor. Si se alinean los astros, Girona podría volver a contar con su antiguo héroe.
Y ese héroe no es otro que Artem Dovbyk, el delantero ucraniano que hizo historia en el club y que ahora podría regresar para liderar un nuevo proyecto ilusionante en Montilivi.