La temporada para el Real Betis ha adquirido tintes positivos después de un comienzo algo decepcionante. Son cuatro partidos consecutivos sin conocer la derrota para los de Manuel Pellegrini, que ya se han enganchado de lleno a la pelea por meterse en puestos europeos. La intención del club bético es la de mantener esta línea ascendente y batallar por aspirar a lo máximo.
Para ello será necesario reforzarse en el mercado de invierno, pues hay algunas posiciones que demandan algún jugador extra que pueda subir el nivel. Una de ellas es, por ejemplo, la del lateral derecho, donde Sabaly se ha acostumbrado a encadenar lesiones y donde Héctor Bellerín no termina de brindar el mejor de los niveles. Por eso, Manuel Pellegrini ya habría solicitado a la dirección deportiva del club de Heliópolis que traigan a un jugador para esa demarcación.
Y uno de los que más agradan, tanto a cuerpo técnico como a directivos, es Pablo Maffeo, según ha informado El Nacional. El futbolista del Mallorca se ha mantenido a un nivel altísimo desde que aterrizó en las baleares y era sólo cuestión de tiempo de que un equipo de mayor prestigio se interesara en él. Y es que el Real Betis está dispuesto a hacer un esfuerzo económico para llevárselo en enero, aunque saben que si se esperaran a verano les saldría más económico.
Pablo Maffeo, el archienemigo de Vinicius
Con contrato hasta 2026, Pablo Maffeo se ha asentado ya como uno de los fijos en los esquemas de Jagoba Arrasate, tal y como ocurrió previamente con el técnico Javier Aguirre. Sin ir más lejos, esta temporada ha estado sobre el verde en 10 ocasiones, siendo siempre un jugador diferencial, tanto en las acciones ofensivas como en las defensivas. Son su polivalencia y su condición de jugador completa las que le convierten en un futbolista del agrado de Manuel Pellegrini.
Esto sería una mala noticia para Vinicius, pues todavía no podría deshacerse de uno de los jugadores con los que más se ha enfrentado desde que llegó al Real Madrid. El pique entre ambos viene ya de largo y en cada duelo ocurre uno nuevo. Gestos de "llorón", entradas a destiempo, discusiones y vaciles son constantes entre ambos.
Son dos jugadores con mucho carácter y con poca paciencia que se encienden con rapidez, por lo que este choque de egos es entendible. Con todo, veremos si el Real Betis es capaz de llegar a un buen acuerdo con el Mallorca para arrebatarle a media temporada a un jugador fijo en sus esquemas. No se antoja nada sencillo, desde luego, pues su cláusula de rescisión de 30 millones es elevada teniendo en cuenta la realidad financiera de la entidad de Sevilla.