En el fútbol, las grandes historias no solo se escriben en el césped o en los despachos. A veces, los detalles más pequeños y los gestos más inesperados acaban siendo proféticos y, con el paso del tiempo, adquieren una dimensión casi legendaria para los aficionados. Eso es precisamente lo que ha sucedido con Keyne, el carismático hermano pequeño de Lamine Yamal, cuya espontaneidad y ocurrencias han conquistado a la afición del Barça y se han viralizado en redes sociales en el contexto de la novela protagonizada por Nico Williams.
El primer gesto viral: Keyne y la celebración que dejó a todos boquiabiertos
Hace solo unos meses, la comunidad barcelonista ya comentaba en tono divertido un vídeo que se difundió durante la celebración de la Eurocopa del pasado verano. En aquella secuencia, Lamine Yamal compartía un momento relajado con su familia, sentado en el césped tras el éxito de la selección. Todo parecía tranquilidad hasta que apareció Nico Williams, protagonista de la actualidad azulgrana en las últimas semanas, para acercarse cariñosamente al entorno del joven delantero.
Al dirigirse a saludar al pequeño Keyne, Nico intentó ganarse su simpatía cogiéndole los mofletes con afecto. La reacción no pudo ser más sorprendente: el hermano de Lamine se levantó de inmediato y, casi huyendo, se alejó de Williams, visiblemente incómodo y sin querer ningún contacto. Aquella escena, tan inocente como espontánea, fue recibida con humor por los seguidores del Barça, que interpretaron el gesto como una travesura propia de Keyne y no le dieron mayor importancia en ese momento. El usuario que ha refrescado este vídeo bromea: "Siempre lo supo. Honor a Keyne Parera".
Segundo capítulo: la “venganza” de Keyne en Montjuïc tras el Barça-Athletic
Sin embargo, la relación peculiar entre Keyne y Nico Williams tendría un nuevo episodio unos meses después. Esta vez, el escenario fue el Estadio Olímpico Lluís Companys, al término de un partido entre el Barça y el Athletic Club en Montjuïc. Al acabar el encuentro, los protagonistas se reunían en el césped junto a familiares y amigos, en un ambiente distendido y de camaradería.
Fue entonces cuando, en medio de la conversación entre Lamine, Nico y su círculo más próximo, Keyne volvió a robarse el protagonismo. Con la naturalidad que le caracteriza, el hermano pequeño recogió una pelota del suelo y, sin pensarlo dos veces, se la lanzó a Nico Williams... impactando directamente en sus genitales. El gesto provocó las carcajadas de los presentes y fue rápidamente compartido en redes sociales, donde los aficionados del Barça no tardaron en convertirlo en meme y en símbolo de “maldición” para el desenlace del caso Nico Williams.
Keyne, lejos de pasar desapercibido, se ha convertido en un auténtico fenómeno viral para la comunidad barcelonista. Es habitual ver cómo protagoniza travesuras en los vídeos y directos de Lamine Yamal, aportando siempre un toque de humor y desparpajo que conecta de inmediato con la afición. Los seguidores culés lo consideran casi un talismán y no faltan los comentarios que lo relacionan, medio en broma medio en serio, con el destino de jugadores que rodean a la perla de la cantera azulgrana.