El mercado de porteros se agita en Mestalla. Tras una temporada de movimientos inesperados, ajustes obligados y decisiones estratégicas desde la dirección deportiva, el Valencia CF ha comenzado a definir su portería de cara al curso 2025/26. Y lo hace con un cambio importante que deja fuera a un protagonista reciente y abre paso a un guardameta que ya ha dado luz verde al proyecto.
El efecto dominó tras el fichaje frustrado de Mamardashvili
Cuando Stole Dimitrievski firmó por el Valencia el verano pasado, lo hizo con la promesa de ser titular. La idea inicial del club era clara: el georgiano Giorgi Mamardashvili se marcharía al Liverpool y su hueco en la portería sería ocupado por el exportero del Rayo Vallecano. Sin embargo, el plan se torció.
El Liverpool, finalmente, decidió mantener una temporada más a Alisson Becker como titular, dejando a Mamardashvili un año más en Mestalla. Esta maniobra dejó a Dimitrievski en un segundo plano, relegado a la suplencia y limitado a disputar partidos esporádicos o encuentros de Copa del Rey. La situación no convenció a Carlos Corberán, nuevo técnico del Valencia, que desde su llegada dejó claro que buscaba otro perfil para su portería.
Julen Agirrezabala, el elegido por Corberán
En este contexto, el nombre de Julen Agirrezabala ha emergido con fuerza. El portero del Athletic Club, campeón de Copa esta temporada y habitual suplente de Unai Simón, ha sido convencido por el propio Corberán para incorporarse al proyecto valencianista. Según avanzó el diario As, el técnico ha hablado directamente con el jugador y ha obtenido una respuesta positiva: Agirrezabala quiere jugar en Mestalla.
El meta vasco ve con buenos ojos la posibilidad de convertirse en titular en un equipo de Primera División que le ofrece minutos y continuidad, dos aspectos que no tiene garantizados en Bilbao. En el Athletic, Valverde cuenta con dos porteros de primer nivel y mantiene su confianza en la rotación entre Unai Simón y Julen. Con el club clasificado para la Champions League, parece complicado que el técnico quiera debilitar esa parcela.
Obstáculos en la negociación: Athletic no lo pondrá fácil
Aunque Corberán ya tiene el “sí” del jugador, ahora llega el tramo más complejo: convencer al Athletic Club. La entidad rojiblanca no está interesada en una venta directa, salvo que reciba una oferta contundente. El valor de mercado de Agirrezabala se sitúa en torno a los 15 millones de euros, una cifra difícil de asumir para el Valencia.
Desde Bilbao se contempla una posible cesión, eso sí, con condiciones: renovación automática del guardameta hasta 2029 en caso de salir y cláusulas que aseguren su retorno a San Mamés. Esta fórmula no encaja del todo con los deseos del Valencia, que quiere incluir una opción de compra en cualquier operación, una exigencia impuesta desde Singapur por la propiedad del club.
Por si fuera poco, el Rayo Vallecano también ha mostrado interés en el meta vasco, lo que podría encarecer aún más las condiciones de salida o poner presión al Athletic para cerrar un acuerdo ventajoso.