Una persona con una camiseta negra y un signo de interrogación en el centro junto a un hombre con barba y camisa verde claro sobre un fondo verde.

Claudio Giráldez lo confiesa públicamente: Sus exigencias al Celta de Vigo

El conjunto gallego necesita reforzar especialmente su delantera.

El Celta de Vigo afronta un mercado de fichajes crucial y su entrenador, Claudio Giráldez, no ha querido andarse con rodeos. El técnico gallego ha sido claro y contundente: necesita, como mínimo, tres refuerzos ofensivos si quiere que su plantilla compita con garantías esta temporada.

La delantera celeste se ha quedado muy tocada tras las salidas de nombres clave, y  la dirección deportiva ya trabaja a contrarreloj para responder a las peticiones de su entrenador.

Una delantera desmantelada

La necesidad no es caprichosa. El propio Giráldez lo explicó sin tapujos: “De los siete atacantes que teníamos el año pasado, hemos perdido a cuatro”. Se refiere a Borja Iglesias, Iker Losada, Fer López y Alfon. De ellos, solo Borja —el famoso “Panda”— sigue en el radar del club como posible regreso, pero de momento no hay nada cerrado.

Posible fichaje del Celta de Vigo
El jugador que podría fichar por el Celta los próximos días. | @rccelta

Las bajas han dejado al equipo con una línea ofensiva tremendamente debilitada. Sin esos perfiles, el Celta pierde gol, desborde y profundidad, tres aspectos fundamentales en el estilo que propone Giráldez. Por eso el míster insiste: “Arriba seguro tenemos que incorporar tres jugadores”.

La mirada puesta en la cantera… y el mercado

Mientras llegan los refuerzos, el técnico mira hacia el filial. Jugadores como Óscar Marcos y Hugo González podrían tener minutos en esta pretemporada, pero el propio entrenador admite que son soluciones temporales. El club necesita futbolistas contrastados si no quiere arrancar la Liga en inferioridad de condiciones.

Claudio Giráldez, entrenador del Celta
Claudio Giráldez y el escudo del Celta en un montaje. | XCatalunya

Giráldez ha reconocido que la planificación de la plantilla se ha visto condicionada por el mercado, pero también insiste en que “los atacantes son los que marcan la diferencia”. Sin fichajes, no se podrá trabajar la competitividad interna que tanto valoró el curso pasado.

El perfil que busca el Celta

El mensaje del técnico no solo va dirigido a los despachos, también lanza una pista clara sobre el tipo de futbolista que quiere. No busca delanteros centro puros exclusivamente, sino jugadores “de enganche, de desborde, de velocidad”. En resumen, dinamita para un ataque que se ha quedado sin chispa tras el éxodo de este verano.

Giráldez ha sido muy prudente a la hora de hablar de nombres concretos. Sobre Bryan Zaragoza o Juan Cruz, se limitó a reconocer que son futbolistas “con mucho talento” y que encajan en el perfil, pero recordó que las negociaciones las gestiona Marco Garcés, director deportivo del club.

Un verano con más dudas que certezas

El calendario avanza, los rivales se refuerzan, y en Vigo siguen esperando movimientos que no terminan de materializarse. La situación comienza a generar cierta tensión entre los aficionados celestes, que ven cómo el equipo se desmantela sin que lleguen sustitutos.

El propio Giráldez reconoció que esta situación condiciona toda la pretemporada. Sin delanteros, los entrenamientos no pueden ser realmente competitivos ni servir para automatizar movimientos ofensivos. Aun así, trata de mantenerse positivo: “Nos exigirá más y generará competencia interna”.

El gran nombre que sobrevuela todo este escenario es el de Borja Iglesias. El delantero sigue siendo la obsesión del cuerpo técnico, pero su regreso no es sencillo. El Panda tiene mercado y su vuelta a Vigo depende de muchos factores económicos y deportivos. Mientras tanto, el equipo no puede esperar eternamente y necesita alternativas reales.

El tiempo corre en contra

Claudio Giráldez ha sido meridianamente claro. El Celta necesita fichajes, necesita gol, y necesita soluciones inmediatas. Las palabras del técnico son una llamada de atención a la dirección deportiva: o llegan los refuerzos en ataque, o la temporada corre peligro desde su inicio. El balón está ahora en el tejado de Marco Garcés.