El Valencia CF encara el inicio del verano con la intención de dar continuidad al proyecto de Carlos Corberán, que ha devuelto al equipo cierta estabilidad en medio de un contexto de dificultades económicas y dudas institucionales. La dirección deportiva trabaja para definir una plantilla competitiva, con el foco puesto en la llegada de refuerzos capaces de elevar el nivel sin hipotecar el futuro del club. El regreso de uno de los jugadores que más ilusión generó en la afición durante el último mercado de invierno se ha convertido, de nuevo, en una prioridad.
La historia de Iván Jaime con el Valencia aún no ha escrito su último capítulo. El futbolista andaluz, que llegó cedido en enero desde el Porto, ha dejado claro que le gustaría volver a enfundarse la camiseta blanquinegra, según informaba El Desmarque. Sabe que en Portugal no tendrá las oportunidades deseadas y, pese a tener contrato hasta 2028 y una cláusula de rescisión de 80 millones, su objetivo es volver a LaLiga.
En su primera etapa en Mestalla, las lesiones frenaron su progresión. Aunque sólo sumó 350 minutos repartidos en 11 partidos, la afición y el cuerpo técnico confían en su calidad y potencial para ser determinante. Iván Jaime, que puede actuar como mediapunta o caído a la izquierda, mantiene intacta la ambición y está decidido a dejar atrás la mala fortuna física que le persiguió el pasado curso.
Corberán insiste en su apuesta por el talento andaluz en el centro del campo
Carlos Corberán no esconde su preferencia por el perfil de Iván Jaime. De hecho, durante la pasada temporada, el técnico de Cheste llegó a alinear juntos al propio Jaime y André Almeida, otro de los pilares del equipo. Esa apuesta táctica evidencia la intención del entrenador de construir un centro del campo creativo, con llegada y versatilidad.
El club sabe que repetir la fórmula de la cesión con opción de compra es la única vía realista para seguir contando con el andaluz. Según las últimas informaciones de la prensa portuguesa, el Porto prefiere esperar ofertas de traspaso, con un precio de salida cercano a los 10 millones, una cifra fuera del alcance valencianista. Sin embargo, tanto Gourlay como Corona —responsables de la dirección deportiva— comparten la visión de Corberán: la cesión es la mejor solución a corto plazo, mientras no surjan compradores firmes.
La planificación del Valencia y los retos económicos en el mercado estival
El Valencia se mueve en el mercado con prudencia. La delicada situación financiera obliga a priorizar operaciones que no comprometan el futuro del club. En ese escenario, el caso de Iván Jaime es paradigmático: los de Mestalla ya rechazaron una oferta de 10 millones por André Almeida, lo que evidencia la apuesta por construir un proyecto desde la paciencia y el talento joven. También 20 'kilos' del Milan por Javi Guerra y otros 20 del Arsenal por Christian Mosquera.