La historia de Aymeric Laporte y su esperado retorno al Athletic Club se ha convertido en uno de los culebrones de este arranque de temporada. El central internacional español quiere volver a San Mamés, pero su fichaje está bloqueado por un contratiempo burocrático que podría obligarle a buscar una alternativa.
La FIFA mantiene en suspenso el fichaje por el Athletic
El problema radica en un retraso en la documentación enviada por el Al-Nassr, que llegó fuera del plazo establecido por la FIFA. Según la información del periodista Joseba Larrañaga, el Athletic ha presentado un recurso al Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) alegando que la demora fue ajena a su control. Tanto el club bilbaíno como el propio jugador y la entidad saudí estaban de acuerdo en la operación, lo que refuerza la esperanza de que la FIFA pueda rectificar pronto.
En Bilbao se confía en una resolución positiva en las próximas dos semanas, aunque los antecedentes no invitan al optimismo. Aun así, se recuerdan casos recientes como los de Benrahma y Fornals, cuyos traspasos fueron validados tras un fallo inicial por parte del organismo.

Laporte, obligado a valorar opciones paralelas
Mientras espera, el central no puede quedarse de brazos cruzados. Este año habrá Mundial y necesita continuidad para ganarse su presencia en la lista de Luis de la Fuente. El Athletic le ha prometido un contrato de tres años con un salario muy inferior al que recibía en Arabia Saudí, lo que demuestra su voluntad de regresar a casa.
Sin embargo, sin una inscripción válida, Laporte corre el riesgo de quedarse varios meses sin competir; hasta enero, concretamente. Por ello, su entorno ha empezado a escuchar propuestas de otros clubes que aún tienen el mercado abierto.
El Besiktas, plan alternativo desde Turquía
El medio Fanatik asegura que el Besiktas ha contactado con los representantes de Laporte para ofrecerle una cesión. La liga turca mantiene su mercado abierto hasta el 12 de septiembre, lo que le permitiría inscribir al jugador de forma inmediata.
La opción no es sencilla, ya que dependerá del calendario del TAS y de la decisión final de la FIFA. Sin ese dictamen, será difícil que el defensa se decida a abandonar Arabia para unirse al conjunto otomano. La prioridad es clara: jugar en el Athletic; Laporte lo ha dejado claro. Pero el calendario juega en su contra y la necesidad de llegar al Mundial 2026 en plena forma le obliga a considerar alternativas.
Si el recurso prospera, será recibido como un héroe en San Mamés. Si no, podría abrir una etapa breve en Turquía para no perder ritmo competitivo. El central sabe que no puede permitirse un semestre en blanco en este momento de su carrera.