En plena ola de calor veraniega, el cielo de Catalunya está a punto de darnos una sorpresa. Después de jornadas de temperatura abrasadora, el horizonte amenaza con un giro inesperado. Pese a la atmósfera veraniega que se respiraba hasta ahora, el Meteocat ha encendido las alarmas: comarcas del interior se preparan para un episodio significativo de lluvias acompañadas de tormentas que pueden alterar la rutina.
Cambio inmediato en Catalunya
Según el Servei Meteorològic de Catalunya, a partir del mediodía de hoy las condiciones serán claramente inestables. Las primeras nubosidades se formarán en el Pirineu i Prepirineu, extendiéndose hacia el prelitoral central y, más tarde, invadiendo la Depressió Central y el prelitoral sur.
Durante la franja comprendida entre las 12 h y las 18 h, se activará una alerta por precipitaciones intensas en más de 20 comarcas, incluyendo de forma destacada el Ripollès, Berguedà, Osona y Lluçanès en nivel de peligro alto. En el resto de áreas afectadas la alerta será de nivel moderado.

Estas lluvias vendrán acompañadas de fenómenos convectivos: tormentas localizadas, posibles ráfagas intensas de viento, y en zonas como el Ripollès y Berguedà, incluso granizo, lo que clasifica el episodio dentro de lo que Meteocat llama ‘temps violent’.
En algunos puntos se podrían registrar más de 20 mm en solo 30 minutos, una intensidad preocupante que eleva el riesgo de inundaciones puntuales y complicaciones en la movilidad. En el siguiente mapa podéis consultar los colores de las zonas afectadas.
Cambios habituales de tiempo en verano
El escenario responde a una dinámica atmosférica típica de verano: el calentamiento del suelo genera fuertes corrientes ascendentes, propiciando el desarrollo de cúmulos convectivos en las zonas elevadas. Al desintegrarse, liberan energía en forma de chubascos intensos y tormentas.
Estos núcleos convectivos, si se intensifican lo suficiente, pueden dejar precipitaciones bruscas, pedrisco y fuertes rachas de viento. Este patrón convectivo es habitual en julio tras paréntesis de calor intenso. En el Ripollès, Berguedà, Osona y Lluçanès el nivel de peligro alcanza el rango alto, debido a la posibilidad de lluvias torrenciales en periodos muy cortos.

En comarcas como Urgell, Segarra, Anoia, Solsonès, Bages y Moianès la situación está en alerta moderada. Las condiciones podrán variar rápidamente: zonas de clima aparentemente calmado pueden verse afectadas por chaparrones localizados.
Calor nocturno en la costa
A pesar del descenso térmico moderado durante la tarde, el ambiente sigue siendo veraniego. El litoral mantiene avisos por calor nocturno en áreas como Barcelonès, Baix Llobregat y Garraf, con mínimas anómalamente altas. En Ponent y el pre-Pirineu, las máximas rondarán los 38 °C, presentando un contraste marcado con el enfriamiento local junto a las lluvias.
Tregua pero mucho calor
La jornada estará marcada por un doble reto: por un lado, el riesgo de precipitaciones intensas plantea posibles inundaciones repentinas y complicaciones viales. Por otro, el calor persistente, especialmente en las zonas litorales y Ponent, mantiene activos los avisos por temperaturas extremas.

Se recomienda extrema precaución: evitar desplazamientos innecesarios entre mediodía y primeras horas de la tarde, vigilar el estado de vías urbanas y rurales, y mantenerse informados a través de fuentes oficiales como Meteocat.