Los últimos días de enero van a cerrar con un panorama marítimo revuelto en la costa norte de Catalunya. Aunque el mar ha ofrecido momentos de calma a lo largo de la semana, el Servei Meteorològic de Catalunya (Meteocat) ha emitido un aviso de situación meteorológica de peligro para la jornada del viernes, centrado especialmente en el estado de la mar.
Las previsiones apuntan a la posibilidad de olas que superen los 2,5 metros (mar gruessa), lo que supone un riesgo evidente para la actividad en playa y para quienes se aventuren a practicar deportes náuticos. El aviso, con un grado de peligro de 1/6 (nivel moderado), afectará concretamente a dos comarcas del litoral gerundense: el Alt Empordà y el Baix Empordà.
Estos territorios, conocidos por la espectacularidad de sus calas y por un turismo de costa muy activo, registrarán un episodio de oleaje que se iniciará a primera hora del viernes (hacia las 07:00 h) y se mantendrá, al menos, hasta las 19:00 h. La causa principal es la entrada de un frente procedente del norte, que favorecerá la formación de olas considerables y vientos de componente norte que agitarán aún más la superficie marina.
El Meteocat ha destacado que la altura de las olas podrá alcanzar o superar los 2,5 metros en numerosos puntos, lo que se traduce en un mar de fondo que puede dificultar el acceso a las playas e incrementar el riesgo de corrientes. Esta situación de mar gruesa, aunque no se encuentra en niveles extremos, sí puede provocar accidentes si no se toman las precauciones necesarias.
Aviso de las autoridades a los habitantes de estas zonas
Las autoridades locales insisten en la recomendación de evitar la línea de costa y los espigones, así como en mantener una distancia de seguridad con cualquier zona que reciba el embate directo de las olas.
Asimismo se recuerda a los navegantes y pescadores que consulten con frecuencia los partes meteorológicos, pues la combinación de viento y oleaje podría derivar en condiciones muy adversas para la navegación, especialmente en embarcaciones de recreo. Del mismo modo, los paseos marítimos y los puertos deportivos pueden verse afectados si el mar supera los niveles habituales y salpica con fuerza en las zonas más expuestas.
El aviso de situación meteorológica de peligro no conlleva, por sí solo, el cierre de playas o accesos al litoral, pero cada municipio puede implementar medidas adicionales, como balizar zonas o impedir el paso a embarcaderos cuando las condiciones resulten peligrosas. Así, es aconsejable mantenerse atento a los comunicados de los ayuntamientos y a la información actualizada que ofrecen las redes sociales oficiales.
Temperaturas estables
La previsión indica que, más allá del oleaje, las temperaturas no registrarán cambios drásticos, por lo que buena parte del litoral catalán conservará un ambiente relativamente suave. Sin embargo, el temporal marítimo podría coincidir con vientos del norte y noroeste, lo que aumentará la sensación de frío y contribuirá a la formación de estas olas de más de dos metros. Según los expertos, el episodio no se extenderá más allá de la tarde del viernes, pero conviene extremar la prudencia mientras el aviso permanezca vigente.