El final de agosto está marcado por cambios en la atmósfera que afectan a gran parte de Europa. Los mapas del tiempo reflejan contrastes claros entre zonas con temperaturas por encima y otras con valores muy por debajo. La transición a un tiempo más variable empieza a notarse en las previsiones semanales.
Y lo que más llama la atención de los expertos es la evolución de los termómetros. Tras varios días de registros extremos, la previsión meteorológica en España anuncia un escenario distinto para esta época del año. La clave está en cómo se reparten estas anomalías negativas en el continente.

Un alivio tras semanas de calor sofocante
El cambio más destacado se aprecia en el centro y norte de Europa, donde las anomalías negativas serán más muy marcadas. Países como Alemania, Francia o Polonia registrarán temperaturas notablemente más bajas que la media para estas fechas. Los meteorólogos confirman que esa tendencia también alcanzará a España, aunque con menor intensidad.
En España, el descenso se dejará sentir sobre todo en la mitad norte y zonas del interior. Ciudades que en días anteriores superaban los 40 grados notarán varios grados menos de lo habitual. El tiempo en España seguirá siendo veraniego, pero sin los excesos de las últimas olas de calor.
"Estamos de enhorabuena", los meteorólogos subrayan la importancia de esta situación después de una de las olas de calor más persistentes del verano. Hablan de un respiro que permitirá recuperar cierta normalidad en el día a día. Además, destacan que la continuidad del calor extremo se interrumpe justo cuando más preocupaba.

Sur y Mediterráneo se mantendrán con valores altos
Las zonas del sur y del litoral mediterráneo continuarán registrando temperaturas elevadas, aunque menos exageradas. Andalucía, Murcia y Comunidad Valenciana superarán los 35 grados. Sin embargo, ya no se repetirá con la misma frecuencia el umbral de los 40 grados.
El contraste será mayor en el noroeste y la meseta norte. Allí, los termómetros quedarán incluso por debajo de lo que marca la media histórica de finales de agosto, con mañanas frescas para la época. Estas anomalías negativas devuelven un respiro a territorios que encadenaban jornadas sofocantes.
Los expertos confirman que seguirá haciendo calor, pero no de forma continua ni extrema. El alivio se notará especialmente porque los valores se moderarán en la mayor parte del territorio. En definitiva, estamos de enhorabuena: España encara un fin de semana más fresco y llevadero.