El embalse de la Llosa del Cavall con un emoticono

Un embalse catalán pierde capacidad y otro gana, todo por el mismo motivo: Protestas

Tensiones entre la población cercana al pantano Siurana

La imagen que dejan hoy los embalses catalanes tiene una explicación directa en una decisión de gestión que ha reavivado un viejo conflicto. El pantano de Siurana ha perdido dos puntos de capacidad en solo veinticuatro horas, quedando en un crítico 18,11 %, mientras Riudecanyes ha ganado más de cuatro puntos y alcanza el 47,14 %. No es casualidad.

La Agencia Catalana del Agua (ACA) ha autorizado un trasvase de 1,03 hectómetros cúbicos desde El Priorat al Baix Camp, con el objetivo de que la Comunidad de Regantes de Riudecanyes disponga de hasta 3,20 hectómetros cúbicos para este verano.

El movimiento, iniciado el lunes, ha provocado protestas en la presa de Siurana. Un centenar de personas, convocadas por entidades como el GEPEC, la Plataforma por el Río Siurana y Aigua és Vida, se concentraron para denunciar lo que consideran un “expolio” del agua, según El Triangle. Desde el GEPEC, su presidente Xavi Jiménez ha acusado a Aguas de Reus, accionista mayoritario del pantano de Riudecanyes, de comprar agua a precio de uso agrario y venderla después como agua de boca.

Personas protestando por el trasvase del pantano de Siurana
Personas protestando por el trasvase del pantano de Siurana | El Triangle

La organización ha pedido que la ciudad renuncie a esta agua y ha recordado que la alternativa de aprovechar agua regenerada de la depuradora de Reus lleva una década sobre la mesa, pero no estaría operativa hasta 2027.

Un conflicto que viene de lejos

El trasvase entre Siurana y Riudecanyes no se realizaba desde 2022, ya que en los dos últimos años había quedado paralizado por la sequía. La medida cuenta con la oposición frontal de las entidades ecologistas, que advierten de que Siurana podría quedar en torno al 15 % de su capacidad una vez completado el movimiento de agua.

Unió de Pagesos se abstuvo en la votación, pidiendo que el agua trasladada se destine únicamente a uso agrícola. Mientras tanto, en tres días Riudecanyes ha pasado de 38,90 % a más del 47 %, una recuperación espectacular para un embalse que estaba en situación crítica.

Evolución del resto de embalses

Más allá de este trasvase, el conjunto de la cuenca interna catalana mantiene una tendencia estable. Hoy el nivel total se sitúa en 76,21 %, apenas una bajada de una décima y media respecto a ayer. Darnius Boadella pierde tres décimas y se queda en el 64,98 %. Sau sufre un descenso más acusado, de casi un punto, situándose en 64,49 %.

Por el contrario, Susqueda sube hasta el 80,79 %, uno de los pocos embalses con dato positivo junto a Riudecanyes. La Baells y La Llosa del Cavall apenas registran variaciones, manteniéndose cerca del 90 % y del 84 % respectivamente. Sant Ponç se mantiene exactamente igual, en el 89,28 %, mientras que Foix baja unas ocho décimas pero sigue en niveles muy altos, por encima del 96 %.

Mañana comenzamos una etapa de varios días en ola de calor. Veremos si las elevadas temperaturas afectan a la capacidad de unos embalses que, como decíamos, se están portando de lujo este verano.