Sabíamos que la lluvia iba a hacer daño en esta jornada de miércoles en Catalunya; y así ha sido. El temporal no será tan catastrófico como lo fue ayer en la Comunitat Valenciana o en Albacete, pero sí que supondrá un riesgo real para la seguridad de los habitantes. Y también se pueden producir inundaciones notables en algunas localidades del territorio.
Esto mismo ha ocurrido, de hecho, en la carretera B-10; concretamente entre las salidas de Badajoz y de Sant Adrià del Besòs. Caudalosos charcos de aguas se han producido en el asfalto y han provocado complicaciones en la conducción, tal y como han informado desde Trànsit. Además, en otras carreteras se han producido otros accidentes también provocados por el agua.
Para esta tarde, la situación adquirirá cotas más peligrosas, al menos en la Catalunya central, por lo que las autoridades recomiendan no utilizar el transporte privado a no ser que sea estrictamente necesario. De hecho, Protección Civil alertan de intensas tormentas en la zona del litoral y prelitoral central.
¿Cómo actuar en esta situación?
Si estás conduciendo y te encuentras con una carretera llena de charcos, es fundamental actuar con prudencia para evitar accidentes. Lo primero es reducir la velocidad, ya que el agua acumulada puede hacer que el vehículo pierda tracción en un fenómeno llamado hidroplaneo, donde los neumáticos pierden contacto con el suelo y el coche se desliza sin control. Además, aumenta la distancia de seguridad con otros vehículos, ya que el frenado es menos efectivo en superficies mojadas.
Evita realizar movimientos bruscos como giros o frenadas repentinas. Si necesitas atravesar un charco profundo, agarra el volante con firmeza y avanza lentamente sin frenar de golpe; una frenada brusca puede hacer que el vehículo derrape. Es aconsejable también evitar grandes charcos cuando sea posible, ya que pueden ocultar baches o irregularidades en la calzada, que a su vez podrían dañar los neumáticos o la suspensión.
Para mejorar la visibilidad, mantén las luces de cruce encendidas, lo cual también hace que otros conductores te vean con mayor facilidad. Si el limpiaparabrisas no funciona correctamente, puede complicarse ver la carretera y reaccionar ante los obstáculos, por lo que es importante revisarlo periódicamente.
En condiciones extremas, si el agua acumulada es excesiva o la visibilidad es muy baja, lo mejor es detenerse en un lugar seguro y esperar a que las condiciones mejoren. Tomarse el tiempo necesario y priorizar la seguridad sobre la rapidez es clave para evitar riesgos al volante en días de lluvia intensa.