Los Mossos d'Esquadra realizaron seguimiento de 189 casos vinculados a la radicalización violenta en Catalunya en el 2023. Esta cifra supone un 8% más respecto al 2022, cuando la policía detectó 175 casos. Un 62% de los casos detectados el pasado año están vinculados a extremismos violentos de ámbito yihadista, un 13% a la ultraderecha y un 4% corresponden a otras etiologías.
El 21% restante no son propiamente radicalizaciones violentas, pero está vinculado a los casos de impacto educativo y social, que afectan a la cohesión social ya la convivencia positiva en los centros educativos. Mossos comunicó 6 casos a la Fiscalía. 3 de estas comunicaciones fueron únicamente a efectos de protección del menor y las otras tres supusieron la apertura de diligencias penales. Los mecanismos de intervención sobre los casos detectados permitieron que en el 78% de éstos se detuviera un posible proceso de radicalización en los primeros 6 meses desde su detección, y en un 15% se revirtieron antes de un año desde su detección.
Por lo general, el abordaje multiagencia consigue que únicamente el 7% de casos detectados se alarguen más allá de un año. La gran mayoría de estas detecciones se produjeron en estadios "incipientes", por lo que con una intervención educativa o asistencial estos procesos de radicalización violenta no evolucionaron hacia la violencia, según explican los Mossos d'Esquadra un comunicado.
Cada caso conocido se evaluó de forma individualizada. Las aproximaciones se realizaron, en función de cada situación, desde la vertiente educativa, policial, de derivación a servicios sociales o de la protección a la infancia y la adolescencia, de acciones de intervención accesoria, y para los casos más graves en que existían indicios delictivos, investigaciones judicializadas.
6100 nuevos profesionales
El cuerpo de Mossos d'Esquadra ha formado a 6.115 profesionales para abordar la comprensión de los procesos de radicalización violenta, qué riesgos suponen y cómo se pueden detectar y aplicar mecanismos de intervención caso por caso.
Esta cifra supone un aumento del 20% respecto a 2022 cuando recibieron esta formación 5.094 personas, y que se traduce a consecuencia del impulso del #PREV en otros ámbitos, el programa de prevención de radicalizaciones violentas de la policía catalana. Durante el año 2023, los Mossos d'Esquadra realizaron 205 jornadas de formación dirigidas a trabajadores del ámbito penitenciario, agentes rurales, maestros de la comunidad educativa, profesionales de protección de la infancia y juventud, representantes de comunidades religiosas, mossos de escuadra, policías locales, y trabajadores de servicios sociales.
En el global del pasado año los Mossos d'Esquadra realizaron 137 reuniones de coordinación entre departamentos con Policías Locales, reuniones regionales, mesas centrales de trabajo y mayoritariamente en Juntas Territoriales de Evaluación y Seguimiento. Estas reuniones nacen de la voluntad del #PREV de evaluar continuadamente su funcionamiento y actualizar sus programas con distintos proyectos de mejora.