En días de calor persistente, cualquier brisa o sombra parece un regalo. Basta que el ambiente se vuelva un poco más amable para que el ánimo general también se eleve. No se trata solo de grados en un termómetro, sino de cómo nos afectan en la vida diaria.
Salir a la calle sin esa sensación de agobio, dormir sin necesidad de ventilador o incluso cocinar sin sudar, ya es una mejora notable. Por eso, hay regiones de España que recibirán con los brazos abiertos el cambio que se avecina. El alivio térmico está a la vuelta de la esquina y llega para quedarse, al menos, por unos días.

Bajón térmico en provincias clave del interior y norte
"El paso de una vaguada con aire polar provocará un desplome casi general de las temperaturas en la España peninsular", confirmaron desde los servicios meteorológicos. Esta entrada de aire frío del norte traerá una bajada notable de entre 6 y 8 grados en 15 provincias concretas. El contraste con los más de 38 °C registrados recientemente en Granada o Montoro será más que evidente.
Zaragoza, Teruel, Huesca, Navarra, La Rioja, Soria y Burgos serán algunas de las más afectadas en el noreste y norte. En el centro peninsular, también se suman Segovia, Ávila, Madrid, Guadalajara y Toledo. Y en el sur y sureste, el descenso llegará a Albacete, Ciudad Real y Córdoba, donde las máximas también se suavizarán de forma destacada.
En todas estas provincias, el ambiente será mucho más llevadero. En algunos casos, como Zaragoza o Madrid, se pasará de 37 °C a 27 °C en apenas 24 horas. Esa diferencia se notará desde primera hora del día y será bienvenida por todos quienes pedían por una tregua desde hace tiempo.

Un alivio que se reparte de norte a sur
El descenso térmico será más notable en el tercio norte, pero no se quedará allí. Castilla-La Mancha, Castilla y León, la Comunidad de Madrid, Extremadura y el interior andaluz también recibirán este aire más templado. "Hasta 8 ºC menos en estas 15 provincias", apuntan desde los servicios especializados.
Solo el sureste peninsular mantendrá el calor debido al viento de poniente, especialmente en Murcia y el sur de Alicante. Allí, se esperan valores que podrían superar los 36 °C. Aun así, el panorama general será de alivio y cielos más limpios.
Este refresco, aunque pasajero, devuelve el confort a millones de personas. Una pausa que se agradece y que recuerda que, poco a poco, el verano empieza a dar paso al otoño.