El ambiente veraniego que ha dominado el territorio catalán durante los últimos días tiene las horas contadas para su final. La estabilidad atmosférica dará paso a una notable inestabilización que transformará radicalmente el panorama meteorológico en toda la región.
Un episodio de tiempo adverso se aproxima, trayendo consigo fenómenos que requerirán la máxima atención de la ciudadanía. La atmósfera se prepara para un cambio de guion significativo que dejará atrás el calor para dar la bienvenida al agua.
Un cambio radical activará los avisos meteorológicos
El Servei Meteorològic de Catalunya (Meteocat) ha actualizado su aviso por situación de peligro a partir de este miércoles por la tarde. El fenómeno principal será la intensidad de lluvia, que se manifestará en forma de chubascos localmente muy fuertes y de corta duración.

Concretamente, se ha activado una alerta ante la posibilidad de registrar precipitaciones que superen los 20 litros por metro cuadrado en tan solo 30 minutos. Esta cantidad de agua puede provocar complicaciones importantes en un corto periodo, especialmente en zonas urbanas con drenajes insuficientes. El grado de peligro máximo se ha establecido en 3 sobre 6, correspondiente al color naranja, un nivel que exige precaución.
El recorrido de las tormentas: Una travesía de poniente a levante
El episodio de inestabilidad comenzará a gestarse durante las primeras horas de la tarde del miércoles en el interior del territorio. Las primeras tormentas se desarrollarán en las comarcas de Ponent, avanzando progresivamente hacia el este a medida que avance la jornada.
La evolución prevista por los modelos meteorológicos indica que los chubascos ganarán organización e intensidad en su desplazamiento hacia la costa. De este modo, las zonas del litoral y prelitoral de Barcelona y Girona serán las más afectadas durante la tarde y noche del miércoles.
Para el jueves, la situación meteorológica presentará variaciones, aunque el riesgo de lluvias intensas continuará presente en buena parte de Catalunya. El foco de mayor peligro se concentrará en el extremo noreste, afectando especialmente a las comarcas de Girona durante la mañana.
Simultáneamente, la inestabilidad también se extenderá por el sur, con chubascos fuertes que podrían descargar en varias comarcas de Barcelona. El aviso se mantendrá activo hasta las ocho de la tarde del jueves, completando así 48 horas de tiempo muy complicado.
Más allá de la lluvia: Viento y aparato eléctrico
Estos chubascos no llegarán solos, ya que se espera que vayan acompañados de otros fenómenos meteorológicos adversos asociados a las tormentas. Las previsiones del Meteocat indican que las precipitaciones pueden ir de la mano de fuertes rachas de viento, un factor que incrementa el riesgo de incidencias.

Además, se anticipa la presencia de un notable aparato eléctrico, por lo que se desaconsejan las actividades al aire libre en las zonas afectadas. La combinación de estos elementos conforma un cóctel meteorológico que debe ser tomado con mucha seriedad por parte de toda la población.
Impacto y recomendaciones ante un episodio adverso
La intensidad prevista de las lluvias podría causar crecidas repentinas de rieras, arroyos y torrentes, así como inundaciones locales en zonas bajas. La movilidad también podría verse afectada, con posibles complicaciones en carreteras secundarias y en áreas urbanas por la formación de grandes balsas de agua.
Ante este pronóstico, se recomienda a los ciudadanos mantenerse informados a través de los canales oficiales y tomar medidas preventivas. Es aconsejable limpiar los sumideros y desagües de patios y terrazas, así como retirar objetos que puedan ser arrastrados por el viento. Se debe extremar la precaución al volante, moderando la velocidad y evitando en todo momento cruzar zonas inundadas.