En una jornada que parecía desarrollarse con total normalidad para los conductores, un incidente inesperado ha complicado la movilidad en una de las principales vías de comunicación del país. Mientras muchos usuarios avanzaban con la rutina habitual de un viernes de junio, la situación dio un giro que acabaría por afectar a miles de personas que transitaban por una de las autopistas más transitadas.
Un problema mecánico colapsa la AP-7 a plena luz del día
La tarde del 20 de junio de 2025 quedará registrada como una de las más problemáticas en lo que a circulación se refiere para la AP-7. Según ha informado el Servei Català de Trànsit a través de su cuenta oficial de Twitter, la avería de un vehículo en la autopista a la altura de Gelida, en sentido sur, ha provocado el corte de uno de los carriles.
El resultado: retenciones que se han prolongado a lo largo de siete kilómetros, afectando directamente a los conductores que circulaban desde Martorell y extendiendo el caos viario hasta bien entrada la tarde.
Las cámaras de tráfico, que han captado el incidente alrededor de las 13:48 horas, muestran una imagen clara de la magnitud del colapso: largas hileras de camiones y turismos, obligados a reducir la marcha y a soportar esperas interminables bajo el sol.
La escena, que se repite en muchos puntos de la red viaria catalana especialmente en fechas señaladas, pone de manifiesto la vulnerabilidad de las grandes infraestructuras ante cualquier imprevisto.
El efecto dominó de una avería en la principal arteria de Catalunya
La AP-7 no es solo una autopista más: se trata de una de las vías más importantes para la movilidad tanto local como de largo recorrido, ya que conecta Catalunya con el resto del Mediterráneo y el centro de la Península.
Cuando un incidente como el ocurrido este viernes interrumpe su funcionamiento normal, las consecuencias no tardan en hacerse notar.
Las retenciones, que en esta ocasión han alcanzado los siete kilómetros, se traducen en retrasos generalizados, frustración de los conductores y un aumento del estrés al volante.
Cabe destacar que, según los datos recogidos a lo largo de los últimos años, los problemas mecánicos son una de las principales causas de incidencias en la AP-7, superando incluso a los accidentes de tráfico en determinados periodos.
El hecho de que la avería se haya producido a mediodía ha agravado la situación, ya que ha coincidido con una franja de elevada circulación tanto de vehículos particulares como de transporte de mercancías. Además, el corte de un solo carril ha sido suficiente para desencadenar un efecto dominó que ha afectado a una de las zonas con mayor densidad de tráfico de la red catalana.