Barcelona enfrenta nuevamente una jornada complicada en materia de tráfico. Varios incidentes y averías en diferentes puntos estratégicos de acceso a la ciudad han provocado fuertes congestiones y largas retenciones, complicando significativamente la movilidad habitual durante la mañana de este miércoles.
Vehículo averiado en el Nus de la Trinitat
La mañana ha comenzado con dificultades cerca del Nus de la Trinitat, uno de los puntos neurálgicos del tráfico en Barcelona. La avería de un vehículo a primera hora ha obligado al cierre parcial de un carril en esta concurrida área, provocando rápidamente importantes retenciones. Según los reportes del Servei Català de Trànsit, la congestión alcanza ahora hasta cuatro kilómetros en la carretera C-58 y tres kilómetros adicionales en la C-33.
Ante esta situación crítica, las autoridades han reaccionado rápidamente habilitando el carril bus VAO de entrada a Barcelona para todos los vehículos, excepto para camiones que superen las 7,5 toneladas. Esta medida de emergencia busca agilizar el flujo vehicular y reducir las molestias generadas por la inesperada avería, que coincidió con uno de los momentos de mayor circulación de vehículos en esta vía.
Accidente en la Ronda de Dalt intensifica los problemas
Casi simultáneamente, un accidente en la Ronda de Dalt (B-20), específicamente a la altura de Sant Gervasi, ha complicado aún más la circulación. Este incidente ha provocado el cierre temporal de un carril en dirección Llobregat, generando grandes colas desde el área de Nou Barris. Esta ronda, especialmente transitada durante las primeras horas del día, ha visto agravada considerablemente su situación, con tráfico casi detenido durante largos minutos.
Las cámaras de vigilancia de tráfico muestran vehículos acumulados en extensas filas, tratando de avanzar lentamente por la única vía disponible. Esta circunstancia, sumada al incidente del Nus de la Trinitat, ha generado un verdadero caos circulatorio en distintos puntos clave de entrada a la ciudad.
Frente a estos incidentes, las autoridades recomiendan a los conductores evitar las zonas afectadas siempre que sea posible y buscar rutas alternativas o utilizar el transporte público para desplazarse. Además, se aconseja a quienes inevitablemente deban transitar por estas vías mantenerse informados a través de los canales oficiales del Servei Català de Trànsit y otros medios de información vial en tiempo real.
Este tipo de sucesos evidencian las vulnerabilidades del sistema vial de acceso a Barcelona, donde pequeñas incidencias pueden tener grandes consecuencias sobre la circulación general. La capacidad de reacción rápida de las autoridades, mediante la apertura temporal de vías alternativas como el carril bus VAO, resulta esencial para mitigar estos problemas.