Nada hacía presagiar que la tranquilidad de la noche iba a verse interrumpida por un episodio de angustia y tensión. Los vecinos se preparaban para descansar cuando, de forma repentina, una columna de humo empezó a expandirse, alterando la rutina y movilizando a servicios de emergencia. La rapidez de reacción fue clave para evitar consecuencias más graves en un suceso que pone de relieve la importancia de estar siempre alerta ante situaciones inesperadas.
El incendio arrasa la primera planta de un edificio en Palamós
La alarma saltó poco antes de la medianoche, exactamente a las 23:55 horas, cuando una llamada al teléfono de emergencias 112 alertó de un incendio en el carrer Santa Marta de Palamós, en el Baix Empordà. El fuego se declaró en la primera planta de un edificio de planta baja más tres pisos, una estructura habitacional donde residen varias familias. La respuesta fue inmediata: siete dotaciones de los Bombers de la Generalitat se desplazaron hasta el lugar para combatir las llamas y coordinar el rescate.
A su llegada, los bomberos se encontraron con un incendio totalmente desarrollado que avanzaba con fuerza, afectando de manera total tres habitaciones y el pasillo de la vivienda. Las altas temperaturas y la acumulación de humo también causaron daños considerables en el baño, el comedor y la cocina. Desde el exterior, los equipos trabajaron intensamente para reducir la virulencia de las llamas, mientras un binomio se preparaba para acceder al interior, extinguir el fuego y asegurarse de que no quedaba nadie atrapado en el interior del piso.
La situación obligó a muchos vecinos a salir al exterior de manera preventiva, mientras que otros tuvieron que confinarse en sus viviendas, algunos incluso refugiados en los balcones, debido a la densa presencia de humo en la escalera. Una vez extinguido el incendio, los bomberos revisaron cada una de las plantas y procedieron a ventilar todos los habitáculos, así como el propio conducto de la escalera, para garantizar la seguridad de los residentes y restablecer la normalidad lo antes posible.
Cinco heridos y la intervención clave del SEM
El balance humano de este incendio, aunque menos grave de lo que podría haberse esperado por la magnitud del suceso, dejó un total de cinco personas heridas, todas ellas por inhalación de humo. Entre los afectados se encuentran tres mujeres y dos hombres, que tras ser atendidos en el mismo lugar por el Sistema d’Emergències Mèdiques (SEM), fueron trasladados al Hospital de Palamós con pronóstico menos grave. La rápida intervención de los servicios médicos permitió evitar complicaciones y asegurar que ninguno de los heridos se encuentre en situación crítica.
Durante toda la operación, el SEM activó una unidad terrestre adicional para dar apoyo en el lugar de los hechos, coordinando el traslado de los heridos y monitorizando el estado de salud del resto de los residentes afectados. La colaboración entre bomberos y sanitarios resultó fundamental para minimizar los daños personales y ofrecer asistencia inmediata a quienes lo necesitaban.
A pesar de que la causa del incendio aún no ha sido confirmada y se mantiene bajo investigación, este incidente sirve como recordatorio de los riesgos que pueden estar presentes en cualquier hogar. Los incendios en edificios de viviendas suelen provocar no solo daños materiales, sino también situaciones de gran peligro por la rápida propagación del fuego y el humo en espacios cerrados. En este caso, la rápida actuación de los equipos de emergencia y la colaboración de los vecinos evitaron una tragedia mayor.