Hace más de seis meses, Daniel Sancho, hijo del reconocido actor Rodolfo Sancho, ingresó en la prisión tailandesa de Surat Thani tras ser condenado a cadena perpetua por el asesinato del cirujano colombiano Edwin Arrieta en agosto de 2023. Desde entonces, su vida ha estado marcada por desafíos constantes, tanto dentro como fuera de los muros penitenciarios.
Una prisión complicada
La prisión de Surat Thani, conocida por su masificación y condiciones precarias, alberga a más de 5.000 reclusos, muchos de ellos condenados por delitos graves. Daniel Sancho comparte celda con otros 16 internos, en un ambiente que él mismo ha descrito como "opresivo" debido al ruido constante y la falta de privacidad. A pesar de la ausencia de drogas y violencia explícita, la convivencia diaria se convierte en un reto, especialmente para un extranjero que enfrenta barreras lingüísticas y culturales.

Informes recientes indican que Sancho ha tenido dificultades para adaptarse al entorno carcelario. La falta de comunicación efectiva, sumada al hacinamiento y la tensión inherente al lugar, lo han convertido en un "blanco fácil" para otros reclusos, generando situaciones de confrontación y estrés. Estas circunstancias han llevado a su equipo legal a considerar la posibilidad de solicitar su traslado a un centro penitenciario con una mayor presencia de extranjeros, buscando mejorar sus condiciones de vida y seguridad.
Defensa de Daniel Sancho
La defensa de Daniel Sancho ha presentado recientemente un recurso de apelación contra la sentencia de cadena perpetua. Este documento, que consta de casi 400 páginas, argumenta que la muerte de Edwin Arrieta fue accidental durante una pelea, y no un acto premeditado como se estableció en el juicio inicial. El equipo legal, liderado por Marcos García-Montes, se muestra optimista respecto a la posibilidad de una revisión favorable por parte del Tribunal de Apelaciones de Phuket.
Por otro lado, la familia de la víctima ha presentado su propio recurso, solicitando que la condena se eleve a pena de muerte y que se aumente la indemnización económica. Este movimiento refleja la complejidad y la tensión que rodean al caso, con ambas partes buscando justicia desde perspectivas opuestas.
En cuanto a la familia de Sancho, su padre, Rodolfo Sancho, ha enfrentado dificultades para visitar a su hijo en prisión. Recientemente, se ha mencionado una supuesta deuda de 200.000 euros con Alice Keartjareanlap, ex asistente jurídica de Daniel, lo que habría impedido su regreso a Tailandia. Sin embargo, Rodolfo ha desmentido estas acusaciones, calificándolas de "tonterías" y reafirmando su compromiso con la defensa y el bienestar de su hijo.

Su vida en la cárcel
Mientras tanto, Daniel Sancho intenta mantener una rutina dentro de la prisión, dedicando tiempo al ejercicio y la lectura. A pesar de las adversidades, ha logrado establecer una cierta estabilidad, aunque la incertidumbre sobre su futuro legal y las condiciones de su reclusión continúan siendo motivo de preocupación tanto para él como para su entorno.