Un robo de cables afectó ayer la circulación ferroviaria entre Cornellà y Molins de Rei en la línea R4 de Rodalies. Hoy, los usuarios de esta misma línea han vuelto a enfrentarse a retrasos, esta vez entre Sabadell Nord y Terrassa, debido a otro acto vandálico contra la infraestructura. Los incidentes de este tipo son cada vez más frecuentes en la red ferroviaria catalana, generando inconvenientes para miles de pasajeros.
Según un comunicado de Rodalies, los trenes circulan con una demora promedio de 25 minutos entre Sabadell Nord y Terrassa Est. El incidente ha obligado a modificar la operativa de algunos trenes, como los que tenían origen en Terrassa Est a las 6:45, 7:00 y 7:15, que comenzaron a circular desde Sabadell Sud. Técnicos de Adif están trabajando para reparar los daños ocasionados por el vandalismo.
Este acto ha generado un caos en el desplazamiento de muchos usuarios que dependen de esta línea para llegar a sus trabajos o estudios. Rodalies ha informado que se prevé restablecer la normalidad en las próximas horas, pero no ha dado un tiempo estimado definitivo.
El robo de cables, una problemática recurrente
La mayoría de los actos vandálicos en la red de Rodalies están relacionados con el robo de cables de cobre, un material de alto valor en el mercado negro. Estos robos generan daños significativos en la infraestructura, afectando la señalización y obligando a los trenes a circular a menor velocidad para garantizar la seguridad. El cobre es altamente cotizado, lo que convierte estas acciones en un problema recurrente para el sistema ferroviario. A pesar de los esfuerzos por implementar medidas de seguridad, estos incidentes siguen ocurriendo con frecuencia, causando importantes retrasos e interrupciones.
La repetición de actos vandálicos pone en evidencia la necesidad de adoptar medidas más efectivas para prevenirlos. Algunas soluciones podrían incluir la sustitución del cobre por materiales menos atractivos o el refuerzo de la vigilancia en los puntos críticos de la red ferroviaria.
Los retrasos y alteraciones en los servicios no solo afectan a los usuarios, sino también a la economía y al medio ambiente, ya que muchos recurren al transporte privado como alternativa. Por ello, es crucial que las autoridades y las empresas ferroviarias intensifiquen los esfuerzos para proteger la infraestructura.
Una red esencial para Catalunya
La línea R4 conecta importantes ciudades como Sabadell y Terrassa, siendo una de las más utilizadas de Rodalies. Cualquier alteración en su funcionamiento afecta a miles de usuarios diarios. Los actos vandálicos no solo generan molestias, sino que también cuestionan la fiabilidad de un sistema clave para la movilidad en Catalunya.
Los usuarios, por su parte, conocedores de estos habituales retrasos, demandan soluciones inmediatas y más comunicación por parte de Rodalies para gestionar mejor estas situaciones. Mientras tanto, muchos pasajeros optan por salir con tiempo adicional para minimizar el impacto de los retrasos en sus rutinas diarias.