Un nuevo accidente ha vuelto a sacudir a la comunidad de conductores y ciclistas en uno de los principales accesos de Lleida. La tarde de ayer, que comenzó con problemas de tráfico y largas retenciones, terminó marcada por la fatalidad. La noticia de la muerte de un ciclista tras un choque con un autocar ha causado impacto entre los usuarios habituales de la carretera y ha reabierto el debate sobre la seguridad vial en la zona.
Impacto en la carretera N-240: Un día negro en Lleida
El accidente mortal ocurrió este martes por la tarde en la carretera N-240, una de las vías más transitadas de la provincia de Lleida. Eran las 15:49 cuando un ciclista de 70 años colisionó violentamente por alcance con un autocar detenido en el tramo comprendido entre los kilómetros 98 y 99, a escasos metros de la conocida rotonda del Jardiland. El suceso provocó la intervención inmediata de los equipos de emergencia, que tuvieron que cortar la carretera durante varios minutos para atender al herido y asegurar la zona.
El ciclista fue trasladado de urgencia al Hospital Arnau de Vilanova, donde ingresó en estado crítico. Pese a los esfuerzos de los sanitarios, la gravedad de las lesiones resultó insalvable y el hombre falleció durante la madrugada, según han confirmado fuentes hospitalarias a Segre.
Una mañana caótica: Otro accidente agrava el tráfico en la N-240
La jornada en la N-240 ya había comenzado de forma accidentada. Solo unas horas antes, a las 8:50 de la mañana, un camión que transportaba 173 cerdos volcó en el enlace con la autovía A-2, justo en la rotonda del Jardiland, en el kilómetro 99,3. El camión quedó atravesado sobre la calzada, lo que obligó a los Mossos d’Esquadra a desviar el tráfico y a regular la circulación durante buena parte de la mañana.
En el operativo participaron cuatro dotaciones de los Bombers de la Generalitat, varias patrullas policiales y efectivos del Servei d’Emergències Mèdiques. El conductor del camión resultó ileso, pero el accidente generó importantes retenciones que se mantuvieron hasta la tarde, justo antes de producirse la tragedia del ciclista. Durante toda la mañana, los equipos de emergencia trabajaron en el traslado de los animales vivos y la retirada de los que no sobrevivieron al siniestro.
El reto de la seguridad en las carreteras de Lleida
Con dos incidentes graves en menos de diez horas y en el mismo punto, la carretera N-240 se convirtió en el centro de todas las miradas. Los investigadores analizan ahora si la acumulación de vehículos y los desvíos previos pudieron influir en el choque entre el ciclista y el autocar. Los datos iniciales apuntan a que el ciclista no pudo evitar el impacto cuando el vehículo pesado se encontraba parado en la vía, posiblemente por el tráfico lento derivado del accidente anterior.
La noticia ha causado conmoción entre los ciclistas que suelen recorrer esta carretera, una vía que, pese a sus características, acumula cada año un número preocupante de accidentes. Las asociaciones de usuarios reclaman mayores medidas de seguridad y mejor señalización en los tramos más conflictivos, especialmente después de jornadas complicadas como la de este martes.