La tarde de este domingo terminó con una noticia trágica en el municipio de Torrelles de Llobregat. Quienes circulaban por la carretera BV-2005, que conecta con Sant Vicenç dels Horts, se encontraron con una situación inusual. Varios vehículos de emergencia y agentes de la policía autonómica trabajaban en un punto concreto de la vía.
Pasaban pocos minutos de las seis de la tarde cuando los Mossos d’Esquadra recibieron un aviso que alteró la rutina dominical. Un motorista de 25 años, vecino de Santa Coloma de Cervelló, se había visto involucrado en un brutal choque con un turismo. A raíz del impacto, el conductor de la motocicleta perdió la vida en el acto.
El suceso tuvo lugar en el kilómetro 3,6 de la BV-2005. Aunque aún se investigan las causas del choque, los primeros indicios hablan de una colisión entre la moto y el coche que desencadenó el fatal desenlace. De esta manera, un joven regresaba o se dirigía a su destino cuando ocurrió el infortunio.
Intervienen efectivos de emergencias de diferentes cuerpos
La llamada de alerta se produjo a las 17.58 horas, una franja en la que ya empieza a caer la tarde. Los Mossos d’Esquadra desplegaron de inmediato cuatro patrullas, sabiendo que se trataba de un siniestro grave. A la par, también acudieron tres dotaciones de los Bombers de la Generalitat y cuatro ambulancias del Sistema d’Emergències Mèdiques (SEM).
El dispositivo de emergencias trabajó de forma coordinada para asegurar la zona y asistir a los posibles heridos. El SEM valoró el estado de los ocupantes del turismo, y una de las pasajeras resultó con heridas leves, recibiendo el alta poco tiempo después. La peor parte se la llevó el motorista, a quien no se pudo salvar.
A lo largo de las siguientes horas, la policía autonómica se encargó de examinar el lugar, tomar declaraciones y reunir indicios. La BV-2005 quedó totalmente cortada al tráfico hasta las 19.30 horas, imposibilitando el paso de vehículos. Este corte supuso demoras para quienes confiaban en usar esta carretera secundaria.
Vuelta a la normalidad
Los agentes, además de realizar las labores de atestado, supervisaron las condiciones del firme y de la señalización. Se espera que la investigación determine la mecánica exacta de los hechos. Por el momento, la hipótesis principal es que fue un choque frontal en un tramo donde un leve despiste puede acabar en tragedia.
A medida que avanzaba la tarde, los equipos de emergencia se retiraron gradualmente, tras limpiar la calzada y restablecer los suministros de tráfico. Sin embargo, los residentes de la zona han quedado sobrecogidos por el accidente. La muerte de un joven, con toda la vida por delante, resalta la fragilidad de la seguridad vial.