La tarde de este domingo ha resultado mucho más complicada de lo habitual para numerosos conductores que circulaban por la AP-7. Un accidente en sentido norte/Barcelona ha bloqueado uno de los carriles en el tramo situado a la altura de Avinyonet del Penedès, generando importantes retenciones. En principio, se estimaba que había al menos dos kilómetros de cola, pero las últimas informaciones han aumentado la cifra.
La vía, acostumbrada a grandes volúmenes de tráfico al final del fin de semana, se ha convertido en un auténtico embudo. Tanto los conductores que volvían hacia la capital como aquellos que transitaban en la zona se han visto sorprendidos por la lentitud. En los paneles informativos, las autoridades aconsejaban extremar la precaución y, cuando fuera posible, optar por rutas alternativas.
A medida que avanzaban los minutos, la situación ha ido empeorando. Se ha confirmado el corte de uno de los carriles, lo que ha generado un cuello de botella para los vehículos que pretendían circular sin interrupciones. En consecuencia, las retenciones han pasado de dos a 4,5 kilómetros, con atascos que se han propagado incluso antes de llegar a Vilafranca del Penedès.
Sin noticias de los posibles heridos
Aunque no han trascendido datos concretos sobre el estado de los implicados, las primeras versiones apuntan a que los equipos de emergencia han acudido rápidamente al lugar. Se han movilizado dotaciones policiales y sanitarias para asistir a cualquier posible persona afectada. Aun así, la mayor parte de los automovilistas que circulaban se ha visto atrapada en caravana, sin forma de esquivar el tramo bloqueado.
Algunos usuarios, poco después de advertir la fila de coches detenidos, han intentado desviarse por salidas previas. Sin embargo, el tráfico dominical, unido a la escasa disponibilidad de rutas alternativas, ha propiciado que la congestión fuera igualmente notable. Las maniobras para retirar los restos del accidente y reabrir el carril cortado han requerido una supervisión exhaustiva para evitar nuevos incidentes.
La AP-7 suele registrar un volumen alto de desplazamientos los domingos por la tarde, cuando muchas personas regresan de segundas residencias o viajes de fin de semana. En esta ocasión, la coincidencia con un siniestro de magnitud suficiente para interrumpir un carril ha agravado el problema. La Dirección General de Tráfico ha recomendado prudencia y paciencia a quienes se aventuraban por ese trayecto.
Entretanto, los servicios de emergencias han proseguido con las labores de evaluación y retirada de vehículos. La prioridad ha sido despejar el carril cerrado lo antes posible para recuperar la normalidad. También se ha instado a los conductores a mantener la calma y a respetar los límites de velocidad en la zona afectada, a fin de no provocar nuevos choques por alcance.