La tranquilidad de la noche se ha visto interrumpida por una cadena de incendios que han movilizado intensamente a los equipos de emergencia. En pocos minutos, diferentes puntos de la ciudad han comenzado a mostrar señales de fuego, obligando a los bomberos a desplegar múltiples operativos en tiempo récord.
Tres incendios en menos de cuatro horas
Los hechos han ocurrido durante esta noche del 14 al 15 de abril en Mataró, donde los Bomberos han tenido que responder rápidamente a tres incidentes separados que han afectado varios contenedores de residuos en distintas ubicaciones. El primer aviso llegó a las 21:16 horas, cuando un contenedor situado en la Avenida Gatassa comenzó a arder inesperadamente, requiriendo la rápida intervención de los servicios de emergencia para evitar que el fuego se propagase.
Apenas trece minutos después, a las 21:29 horas, otra alerta se activó muy cerca del primer incidente, concretamente en la Plaça de la Gatassa, donde otro contenedor se incendiaba bajo circunstancias aún desconocidas. La proximidad temporal y espacial de estos dos eventos ha levantado sospechas sobre una posible relación, aunque por el momento las autoridades no han confirmado oficialmente esta hipótesis.
El último incendio se produjo ya entrada la madrugada, concretamente a las 00:35 horas, en la calle Lapidario, donde ardieron dos contenedores más y, además, un colchón abandonado en las proximidades. Este incidente, separado por varias horas de los anteriores, podría responder a causas independientes, pero todavía está siendo investigado por las autoridades locales.
Rápida respuesta de los Bomberos
Ante la sucesión rápida de estos incendios, los Bomberos han desplegado diversas dotaciones que han trabajado intensamente durante toda la noche para controlar las llamas y evitar daños mayores en vehículos estacionados o propiedades cercanas. La eficaz y rápida respuesta ha permitido contener rápidamente los incendios, evitando que se extendieran a viviendas o comercios, lo que hubiera aumentado significativamente los daños materiales.
Las autoridades locales y los servicios de emergencia no descartan que al menos los dos primeros incidentes puedan estar relacionados debido a la coincidencia en tiempo y lugar. De confirmarse esta hipótesis, podría tratarse de actos intencionados, por lo que la Policía ha iniciado una investigación para esclarecer las circunstancias que rodean estos sucesos.
En paralelo, se ha reforzado la vigilancia en las zonas afectadas para prevenir nuevos episodios, tranquilizar a la población y recabar posibles testimonios que puedan aportar luz sobre lo ocurrido.
Estos incendios evidencian nuevamente la vulnerabilidad de los contenedores urbanos frente a actos vandálicos o negligencias que pueden provocar importantes daños materiales y generar situaciones de peligro. Las autoridades locales podrían considerar reforzar medidas preventivas, incluyendo campañas de concienciación ciudadana, incremento de la vigilancia nocturna y posibles modificaciones en la ubicación o protección de estos depósitos.