Un agente de los Mossos d'Esquadra y la ciudad de Lleida

Lleida fuera de control, 3 detenidos: Agreden a los Mossos e incendian contenedores

Un hombre paseaba con un perro peligroso y ahí se originó todo el caos

El centro histórico de Lleida suele ser un lugar con ritmo pausado, donde vecinos y turistas conviven con la arquitectura característica de la zona. Sus calles estrechas y su patrimonio cultural invitan a disfrutar de la historia de la capital del Segrià. Sin embargo, los acontecimientos de la tarde del martes han roto esa calma y han generado gran inquietud entre residentes y viandantes.

El suceso se desencadenó cuando  un grupo numeroso ha reaccionado violentamente a la identificación de un hombre que paseaba con un perro peligroso. Hasta el momento, se desconocen los detalles exactos que han originado los primeros enfrentamientos. Lo que sí ha trascendido es que, en pocos minutos, se han producido agresiones a agentes de los Mossos d’Esquadra y se han incendiado contenedores en los alrededores de la plaza Josep Solans.

Un coche de policía con un letrero de emergencias 112
Coche del SEM 112 | ACN

Según la información publicada por El Caso, han sido tres las personas detenidas tras el caos desatado. Dos de ellas son hermanos y la tercera es una mujer. Estas personas, de origen sudamericano y nacionalidad española, pertenecen a la misma familia de etnia gitana, y están acusadas de un delito de atentado contra agentes de la autoridad.

Agentes de los Mossos agredidos

Los Mossos han confirmado que tres de sus efectivos han resultado heridos de carácter leve. Aunque los golpes han sido de escasa gravedad, la tensión en la zona ha obligado a activar a la unidad ARRO (Área Regional de Recursos Operativos). Esta unidad se ha encargado de mantener un cordón de seguridad en torno a la multitud violenta, a la espera de refuerzos.

Mientras tanto, varios contenedores ardían en las calles, generando un humo denso y el temor de que las llamas se propagaran a edificios cercanos. Los Bomberos han intervenido con rapidez para controlar los focos de incendio y evitar mayores daños materiales. Aun así, el aspecto de las calles ha quedado seriamente alterado por restos de ceniza y plástico quemado.

La presencia policial se ha mantenido elevada para contener la furia de la multitud, que en algunos momentos ha superado el control de los primeros agentes desplegados. Algunas personas se han enfrentado abiertamente a los Mossos, lanzando puñetazos y profiriendo insultos. Ante este panorama, las autoridades han pedido calma a los vecinos y han recomendado extremar las precauciones en la zona.

Tras varios minutos de disturbios, el refuerzo policial ha conseguido estabilizar la situación y reducir a los principales involucrados. Los arrestados han sido puestos a disposición judicial, acusados de atentar contra agentes de la autoridad, con la posibilidad de que se les sumen otros cargos en función del resultado de la investigación. Los daños causados por los contenedores incendiados y las agresiones son objeto de peritajes y valoraciones posteriores.

Según las fuentes de El Caso, no se descartan más detenciones en las próximas horas. Los Mossos d’Esquadra han abierto diligencias para determinar qué ha desencadenado la reacción violenta y esclarecer las circunstancias que han llevado a este estallido de altercados en el corazón de Lleida. Por el momento, el cuerpo policial mantiene un dispositivo reforzado en el barrio antiguo para evitar nuevos enfrentamientos y devolver la normalidad a unas calles golpeadas por la tensión y las llamas.