La lucha contra los incendios forestales en Catalunya vuelve a teñirse de luto tras un trágico accidente que se ha cobrado la vida de un auxiliar forestal. Este verano está dejando una profunda huella por la devastación causada por las llamas, pero también por la pérdida humana que supone combatirlas. La comunidad y los equipos de emergencia han recibido la noticia con gran pesar.
Un accidente mortal en plena intervención
Este jueves, un auxiliar forestal, miembro del equipo de apoyo en la lucha contra incendios forestales (EPAF), perdió la vida tras sufrir una caída de aproximadamente veinte metros mientras participaba en los trabajos de extinción del incendio declarado en Paüls, comarca del Baix Ebre. Así lo ha informado la periodista Anna Punsí a través de su cuenta oficial de Twitter.
El hombre se encontraba realizando tareas cruciales para facilitar el acceso de los bomberos y mejorar la eficacia de los dispositivos de extinción, cuando ocurrió la desgracia.

La víctima fue rápidamente asistida por sus compañeros en primera instancia, y posteriormente trasladada en estado crítico por un helicóptero del Servei d'Emergències Mèdiques (SEM) al Hospital de Tortosa. Pese a la rápida reacción y atención sanitaria recibida, los médicos no pudieron hacer nada para salvar su vida, lo que ha supuesto un fuerte golpe anímico para todo el equipo de emergencias.
Un verano especialmente trágico en Catalunya
La muerte del auxiliar forestal se suma a otros sucesos dramáticos que se han registrado en Catalunya durante esta campaña de incendios. Hace apenas unos días, otros dos trabajadores perdían la vida en la comarca de la Segarra, dejando claro el peligro extremo al que están expuestos quienes luchan contra las llamas en primera línea.
Estos incidentes resaltan la enorme presión y riesgos a los que están sometidos estos profesionales. Este verano está siendo particularmente crítico debido a las altas temperaturas, la sequía prolongada y la dificultad creciente de combatir fuegos cada vez más intensos y virulentos. El Baix Ebre, donde se produjo este último accidente, ha sido una de las zonas más afectadas por las llamas, con varios focos activos a lo largo de las últimas semanas.
El papel clave de los EPAF
Los auxiliares forestales, conocidos como EPAF, son personal laboral contratado específicamente para apoyar a los bomberos en las tareas de extinción y prevención. Su función incluye facilitar accesos seguros, abrir líneas de defensa y asistir en la gestión de recursos de agua, cruciales para sofocar incendios rápidamente.

La importancia de estos equipos es vital, especialmente en zonas de difícil acceso y terrenos abruptos como el de Paüls, que incrementan considerablemente la complejidad de los trabajos de extinción. Por ello, la pérdida de un miembro del EPAF no solo supone un impacto emocional, sino también operativo, dado su papel esencial en el terreno.