El día de ayer fue sin duda una jornada trágica para el futbol en Catalunya, cuando se dio a conocer que un jugador de las inferiores del UE Olot murió. El joven de 17 años, Aniol Llach, perdió la vida tras un trágico accidente de tráfico que tuvo lugar en su pueblo. La localidad en cuestión era Les Planes d'Hostolets, ubicada en la comarca gironina de La Garrotxa.
En concreto, el siniestro se produjo en la avenida Narcís Arnau, lugar donde Aniol acabó perdiendo la vida. Como era de esperar, los distintos clubes de Catalunya dedicaron el pésame a los familiares y cercanos del joven. Equipos como el RCD Espanyol, el Girona FC, el Sant Andreu o el Palamós lamentaron la pérdida del joven catalán de tan solo 17 años de edad, nacido en 2007.
Además, como parte del momento de luto, el mismo Olot anunció que todos los encuentros del UE Olot base quedan aplazados este fin de semana. Por otro lado, el día de hoy, el cual tenía que quedar como una jornada para el recuerdo y el homenaje al chico, ha acabado dándonos una noticia muy impactante.
Detienen a un implicado en el accidente
Los Mossos d'Esquadra han detenido al conductor del vehículo implicado en el accidente en la C-63 en Les Planes d'Hostoles (Garrotxa). Donde este jueves falleció el joven de 17 años de edad.
La policía le achaca un delito contra la seguridad del tráfico e imprudencia grave con resultado de muerte. El conductor, de 57 años, dio negativo en la prueba de alcoholemia.
La víctima chocó contra un coche que circulaba por la misma vía. Como consecuencia del impacto, el joven terminó herido muy grave. Pese a que los equipos de emergencia llegaron rápidamente, pero nada pudieron hacer para salvar la vida del joven que acabó muriendo.
Los hechos ocurrieron alrededor de las cuatro y media de la tarde cuando la moto y el coche se toparon en medio de la vía. Hasta la zona se desplazaron varias ambulancias del Sistema de Emergencias Médicas (SEM) a más de tres dotaciones de Mossos d'Esquadra, que dieron paso alternativo a los vehículos.
El delito al que se enfrenta el hombre
Ser detenido por un delito contra la seguridad del tráfico e imprudencia grave con resultado de muerte tiene severas consecuencias legales y sociales. En el ámbito penal, puede llevar a una condena de prisión que, en casos graves, puede superar los cuatro años.
Además de la retirada del permiso de conducir por un período prolongado, generalmente de hasta diez años. También puede incluir una multa económica considerable.
En el aspecto civil, el responsable enfrenta la obligación de indemnizar a las víctimas o sus familiares, lo que puede implicar un importante impacto financiero. Además, la mancha en el historial personal y profesional puede dificultar encontrar empleo o participar en actividades que requieran confianza pública.