Un hombre de traje gesticula mientras tres policías de espaldas observan el entorno.

Un año después: El desgarrador testimonio de la familia de la cocinera asesinada

La familia de la cocinera rompe el silencio.

​El 13 de marzo de 2024, una tragedia sacudió a una familia catalana cuando su hermana, Núria López, fue  asesinada en su lugar de trabajo. Núria era cocinera en una institución penitenciaria y, según sus familiares, había expresado preocupaciones sobre la conducta de un interno con antecedentes violentos. Un año después, sus hermanos han decidido  romper el silencio y exigir respuestas sobre las circunstancias que llevaron a su muerte.​

Denuncias ignoradas y antecedentes preocupantes

Núria había presentado varias quejas contra el interno que, finalmente, la atacó con un cuchillo en la cocina de la prisión. Este recluso  ya había sido condenado por el asesinato de una mujer en Valls años atrás y, según los familiares,  se había negado a participar en terapias de rehabilitación. Además, a pesar de haber sido sancionado por su comportamiento, no cumplió con las medidas disciplinarias impuestas. Funcionarios y médicos también habían alertado sobre su peligrosidad, pero, a pesar de estas señales, continuó trabajando en áreas sensibles dentro de la prisión. ​

Falta de comunicación y apoyo institucional

La familia de Núria se enteró de su asesinato a través de los medios de comunicación, sin recibir una notificación oficial previa. Aunque inicialmente recibieron apoyo del equipo de la entonces consellera Gemma Ubasart, sienten que la actual administración, encabezada por el conseller Ramon Espadaler, los ha dejado de lado. "Nos hemos sentido totalmente abandonados por el nuevo conseller", afirman. Además, lamentan no haber recibido una disculpa pública ni explicaciones claras sobre las negligencias que permitieron que el agresor tuviera acceso a armas blancas dentro de la prisión. ​

Un grupo de personas con uniformes oscuros y cascos avanzan por un pasillo.
Mossos d'Esquadra haciendo su trabajo. | Policía Nacional

Exigencia de respuestas y justicia

Un año después del trágico incidente, los hermanos de Núria buscan cerrar su duelo con dignidad y claridad. Desean comprender qué falló en los protocolos de seguridad que permitieron que un recluso con antecedentes tan graves tuviera acceso a zonas críticas y herramientas peligrosas.  "Queremos saber qué pasó ese día. Cada vez que llega un rumor, nos hunden más. Necesitamos que la Generalitat lo explique", expresan. La investigación judicial sigue abierta en un juzgado de Tarragona, y la familia espera que se reconozcan los errores y se implementen medidas para que tragedias similares no vuelvan a ocurrir. 

Reflexión sobre la seguridad en instituciones penitenciarias

Este caso pone de manifiesto la importancia de revisar y reforzar los protocolos de seguridad en las prisiones. La presencia de internos con antecedentes violentos en áreas donde pueden acceder a herramientas peligrosas plantea serias dudas sobre las medidas de control existentes. Además, la  falta de respuesta y apoyo a las familias afectadas tras incidentes tan graves resalta la necesidad de una comunicación más efectiva y humana por parte de las instituciones.​

La familia de Núria López continúa su lucha por justicia, esperando que su dolor sirva como catalizador para cambios que garanticen la seguridad de los trabajadores penitenciarios y la responsabilidad de las autoridades en la protección de sus empleados.​