Un agente de los Mossos d'Esquadra de espaldas observa la escena de un accidente de tráfico en una carretera con varios vehículos involucrados

Detenido: Así la ha liado un camionero en la AP-7

El trágico suceso ha pasado a la altura de Fogars de la Selva.

Los Mossos d’Esquadra han detenido a un camionero en Girona tras descubrir que fue el responsable de un accidente múltiple que involucró a siete vehículos en la autopista AP-7, a la altura de Fogars de la Selva. Lo que en un primer momento parecía un simple reventón de neumático, acabó destapando una trama de manipulación y fraude-

Una rueda, siete coches y caos en la autopista

El accidente tuvo lugar el miércoles anterior. Los servicios de emergencia recibieron el aviso de un siniestro múltiple en plena AP-7. Al llegar, encontraron varios coches dañados y algunas personas heridas, aunque afortunadamente con lesiones leves.  La causa: los restos de un neumático de camión que, tras reventar, quedaron en medio de la vía. Los conductores no pudieron esquivarlos a tiempo, y el caos fue inmediato.

Las colas no tardaron en formarse. Durante horas, el tráfico estuvo colapsado con retenciones que llegaron a alcanzar los siete kilómetros, afectando a miles de conductores en plena operación de verano. Pero el verdadero giro en esta historia vino cuando los agentes iniciaron la investigación para localizar el vehículo responsable.

Un agente de policía de espaldas junto a un coche patrulla de los Mossos d'Esquadra.
Un agente de policía de espaldas junto a un coche patrulla de los Mossos d'Esquadra. | Mossos d'Esquadra, XCatalunya

Localizado cambiando la rueda… y con trampa

Lo que parecía un simple accidente por mala suerte comenzó a adquirir un tinte mucho más grave. Los Mossos, al inspeccionar el vehículo, detectaron una anomalía llamativa: los neumáticos que llevaba instalados no coincidían con los que figuraban registrados en el tacógrafo ni con el limitador de velocidad.

El camionero estaba circulando con ruedas de un diámetro mayor al autorizado. ¿Por qué? Porque esta alteración le permitía recorrer más distancia en menos tiempo sin que el tacógrafo —el dispositivo que registra los kilómetros, el tiempo de conducción y la velocidad— registrara adecuadamente los datos. 

Un agente de policía de espaldas observa a un motociclista en la carretera con un velocímetro superpuesto en la imagen.
Un agente de policía de espaldas observa a un motociclista en la carretera con un velocímetro superpuesto en la imagen. | Mossos d'Esquadra, XCatalunya

Del accidente a la detención por falsificación

El uso de neumáticos no autorizados no solo provocó el accidente, sino que estaba claramente vinculado a un intento de manipulación del registro de actividad del camión. Tras revisar en detalle el tacógrafo, la policía autonómica catalana procedió a detener al conductor por un presunto delito de falsificación de documento público.

El detenido, de 49 años y sin antecedentes penales, se encuentra a la espera de pasar a disposición judicial. Será el juzgado de instrucción de guardia de Girona quien determine los pasos a seguir. En cualquier caso, la gravedad de los hechos —conducir con un sistema manipulado y provocar un accidente que puso en riesgo la vida de múltiples personas— apunta a posibles sanciones severas.

Una práctica más común de lo que parece

Este caso ha vuelto a poner sobre la mesa una realidad que preocupa al sector del transporte: la manipulación de tacógrafos no es anecdótica. En un entorno altamente competitivo, algunos profesionales optan por trucos ilegales para aumentar su productividad a costa de la seguridad vial.

El uso de neumáticos inadecuados, la alteración del software o incluso imanes para engañar a los sistemas de control son técnicas conocidas por las autoridades. Los Mossos, junto con la Dirección General de Tráfico, intensifican los controles en fechas clave para evitar que este tipo de fraudes acabe en tragedia.

En este caso concreto, no hubo víctimas graves, pero el incidente pudo haber terminado mucho peor. El caso servirá de ejemplo. El mensaje es claro: trucar el camión para ganar unos kilómetros más puede salir muy caro. No solo por la multa o el juicio, sino porque se pone en juego la vida de todos los que comparten la carretera.