Cinta negra de luto sobre la puerta de una furgoneta de los Mossos d'Esquadra

Un hombre intenta atacar con un cuchillo y acaba muriendo: Imágenes terribles

Los Mossos tuvieron que utilizar el gas pimienta ante la agresividad del atacante

La noche de una de las festividades más celebradas del año se tiñó de tensión y alarma tras un incidente que, en cuestión de minutos, se volvió el centro de todas las miradas. Los hechos, captados en vídeos que han comenzado a circular en redes sociales, muestran escenas de extrema violencia que han generado un fuerte impacto entre quienes han presenciado las imágenes.

Tal y como ha informado El Caso, todo comenzó pasadas las once de la noche, cuando numerosos testigos alertaron de la presencia de un hombre armado con un cuchillo. Las primeras llamadas de socorro llegaron poco después de iniciarse los fuegos artificiales que marcan la verbena de Sant Joan, un contexto que suele ir acompañado de celebraciones multitudinarias y un elevado tránsito de personas en las principales estaciones de transporte del Vallès. La alarma se extendió rápidamente entre los viajeros y trabajadores, al constatar que el individuo no solo blandía el arma, sino que mostraba una actitud visiblemente alterada y agresiva.

Las primeras intervenciones se dieron en la vía pública, pero la situación se trasladó dentro de las instalaciones de una de las estaciones de tren más concurridas de Sabadell, donde el hombre accedió aún empuñando el cuchillo y continuó amenazando tanto a usuarios como al personal de seguridad. La llegada de los Mossos d’Esquadra y la rápida respuesta de los vigilantes de seguridad privada resultaron decisivas para contener un episodio que podría haber acabado en tragedia.

Un coche de policía de los Mossos d'Esquadra con gotas de lluvia en la carrocería.
Coches de los Mossos d'Esquadra | ACN

Intervención policial y momentos de máxima tensión

Los agentes de la policía autonómica, tras recibir información precisa sobre la actitud del agresor, intentaron primero reducirlo mediante órdenes verbales claras, solicitando reiteradamente que depusiera el cuchillo y abandonara cualquier intento de agresión. Sin embargo, lejos de colaborar, el hombre incrementó su violencia y desobedeció las indicaciones, generando una situación de riesgo extremo tanto para los agentes como para los civiles presentes en la estación Sud de Renfe, en Sabadell.

Los vigilantes de seguridad privada, en un intento por evitar daños mayores, recurrieron al uso de gas pimienta para frenar el avance del hombre. Solo entonces, y después de varios minutos de gran tensión y peligro, pudieron finalmente reducirlo, retirarle el cuchillo e inmovilizarlo en el suelo. Durante estos instantes, uno de los Mossos llegó a desenfundar su arma de fuego ante la amenaza directa, aunque optó por no hacer uso de ella, una decisión que revela la gravedad del momento y la preparación de los efectivos policiales para actuar con proporcionalidad y cautela.

El desenlace y la investigación en marcha

A pesar de que el hombre fue rápidamente asistido por los servicios de emergencia médica (SEM), que se habían desplazado al lugar en cuestión de minutos, su estado empeoró durante el traslado y finalmente falleció en el hospital. La identidad, edad y nacionalidad del fallecido no han trascendido, mientras la investigación se centra en esclarecer los motivos detrás de este comportamiento extremadamente agresivo.

Fuentes próximas a la investigación consultadas por El Caso no descartan que el individuo actuara bajo los efectos de sustancias estupefacientes, un factor que podría haber sido determinante para explicar el estado de alteración y violencia mostrado durante el ataque.