Este miércoles 13 de noviembre, la AP-7 se ha convertido en el epicentro del caos circulatorio en Catalunya. Las intensas lluvias provocadas por la DANA han obligado a implementar restricciones de movilidad, generando colas kilométricas en esta importante vía. Las autoridades han decidido cerrar temporalmente algunos tramos para garantizar la seguridad de los ciudadanos.
Especialmente en la zona de Altafulla, donde la circulación está completamente interrumpida. Las restricciones de tráfico afectan tanto a la AP-7 como a otras carreteras principales, como la C-14, la N-340, la T-11 y la N-420.
Estas medidas, coordinadas por los Mossos d’Esquadra y el Servei Català de Trànsit, buscan minimizar los riesgos de inundación y reducir los posibles accidentes. Las comarcas más afectadas son Baix Camp, Baix Ebre, Montsià, Ribera d’Ebre y Tarragonès. Donde la movilidad está limitada a servicios esenciales y causas de fuerza mayor.
Protección Civil emite alertas y refuerza la seguridad
El aumento del caudal de los ríos y el riesgo de desbordamientos han sido factores clave en la decisión de restringir el tráfico. Protección Civil ha activado la alerta del plan INUNCAT, que se encarga de gestionar las emergencias relacionadas con las inundaciones en Catalunya.
Según han informado, la medida estará en vigor desde las 6 de la mañana hasta la medianoche, tiempo en el cual se espera que las lluvias más intensas afecten el territorio. Las restricciones incluyen la suspensión de clases y actividades deportivas en las comarcas afectadas.
Las autoridades han insistido en que estas medidas son preventivas y buscan proteger a la población ante un fenómeno meteorológico extremo. “La seguridad de la ciudadanía es nuestra prioridad”, han afirmado desde Protección Civil.
Servicios esenciales sin restricciones
Pese a las limitaciones en la movilidad, los servicios esenciales no se han visto afectados. Personal de emergencias, cuerpos de seguridad, personal sanitario y transporte público continúan operando para asistir a la población.
Esta excepción también incluye la distribución de alimentos y productos de primera necesidad, así como el acceso a recursos básicos, como agua y electricidad, necesarios para las áreas más vulnerables. Esta medida ha sido pensada para que, a pesar de las dificultades, se mantenga una red de apoyo para la población en situación de emergencia.
Tránsito complicado y colas interminables
Las imágenes compartidas en redes sociales muestran largas filas de vehículos en la AP-7 y otras carreteras afectadas. Camiones, autobuses y coches han quedado atrapados en interminables colas que ralentizan el tráfico durante horas.
Los conductores se han visto obligados a detenerse en espera de que se reanude la circulación en algunos puntos estratégicos. La paciencia ha sido la clave para sobrellevar una jornada complicada en la que el mal tiempo ha puesto a prueba la resistencia de todos los ciudadanos afectados.
La Generalitat ha instado a los ciudadanos a evitar los desplazamientos innecesarios y a consultar las recomendaciones de Trànsit para estar informados sobre el estado de las carreteras. En un esfuerzo por mantener la seguridad y la fluidez del tráfico, los Mossos d’Esquadra han establecido puntos de regulación en las vías más transitadas.