Un salvavidas sentado en una silla de vigilancia en la playa con una bandera roja ondeando indicando peligro en el mar.

Aviso urgente de Protección Civil: Tres playas cerradas

Lo han anunciado a través de su cuenta oficial de Twitter

El anhelado chapuzón para combatir el calor del verano se ha visto truncado de forma abrupta para miles de bañistas. Lo que prometía ser una jornada perfecta de sol y mar se ha transformado en una advertencia sanitaria que ha obligado a las autoridades a tomar medidas drásticas.

La bandera roja, el símbolo inequívoco de peligro, ondea en varias playas, prohibiendo el baño y generando una mezcla de frustración e incertidumbre entre los presentes, que han visto cómo la orilla quedaba vetada por un enemigo invisible pero potencialmente peligroso.

La alerta, emitida por Protección Civil, se ha extendido rápidamente a través de los canales oficiales, instando a la población a extremar las precauciones. El motivo es claro y preocupante: la mala calidad del agua. Este incidente no solo afecta a un punto aislado, sino que pone de manifiesto la fragilidad de nuestros ecosistemas costeros, especialmente durante la temporada alta.

Bandera roja ondeando en la playa con el mar de fondo.
Una playa con bandera roja | Twitter

Badalona, el epicentro de la alerta sanitaria

El foco principal de esta prohibición se ha situado en la costa de Badalona. Durante la jornada de este viernes, los servicios de vigilancia y socorrismo izaron la bandera roja en tres de sus concurridas playas urbanas, una medida que se tomó de inmediato tras recibir los resultados de los últimos análisis del agua. El aviso de Protecció Civil, difundido a través de sus redes sociales, fue contundente: "Bandera vermella a les platges de Badalona per mala qualitat de l'aigua. Prohibit el bany".

La prohibición afecta a un tramo significativo del litoral badalonés, una zona muy popular tanto para los residentes locales como para los visitantes del área metropolitana de Barcelona.

Además, el comunicado oficial amplía el alcance de la advertencia, señalando que en "buena parte del litoral central hay bandera amarilla por la misma razón".

La bandera amarilla, si bien no prohíbe el baño, recomienda hacerlo con precaución, lo que sugiere que el problema de la calidad del agua es más extenso de lo que parece a simple vista, afectando a otras localidades costeras cercanas.

¿Cuál es el origen de la mala calidad del agua?

Aunque las autoridades no han detallado de forma inmediata la causa específica que ha provocado este episodio de contaminación, los precedentes y la dinámica de la zona apuntan a varias hipótesis. Históricamente, la calidad del agua en esta franja del Mediterráneo puede verse comprometida por una combinación de factores, especialmente tras episodios de lluvias intensas.

Las tormentas de verano, aunque breves, pueden arrastrar una gran cantidad de residuos y contaminantes desde las zonas urbanas hasta el mar a través de las rieras y los sistemas de alcantarillado. Asimismo, los sistemas de saneamiento pueden verse sobrecargados, provocando vertidos puntuales de aguas no tratadas.

Playa de Calafell
Una playa | Costa Daurada

La presencia de bacterias como E. coli o enterococos por encima de los límites permitidos suele ser el detonante para decretar la prohibición del baño, ya que suponen un riesgo para la salud de los bañistas, pudiendo causar infecciones gastrointestinales o dermatológicas.

Este tipo de incidentes no es nuevo en el litoral catalán, donde la alta densidad de población y la presión turística ponen a prueba constantemente las infraestructuras de saneamiento y la resiliencia del medio marino.