La jornada de este martes en la comarca de l’Anoia ha estado marcada por la intervención de los Bombers de la Generalitat en dos incendios distintos que han afectado a vehículos. Aunque no ha habido que lamentar daños personales, ambos sucesos han generado expectación entre los vecinos y han requerido la rápida actuación de los servicios de emergencia para evitar consecuencias mayores.
La simultaneidad de ambos episodios ha reforzado la atención sobre la seguridad en carretera y en zonas urbanas, especialmente en un contexto donde los incendios de vehículos han ido en aumento en los últimos meses en distintos puntos del territorio catalán.
Un primer aviso: fuego en un camión de basura
El primero de los incidentes tuvo lugar durante la tarde, cuando un camión de recogida de residuos comenzó a arder en plena vía pública. El vehículo realizaba su ruta habitual cuando, por causas que aún se desconocen, empezó a emitir una intensa humareda que pronto se convirtió en llamas.

Los vecinos alertaron de inmediato al 112, y en pocos minutos dos dotaciones de los Bombers acudieron al lugar para sofocar el fuego. Las imágenes del humo ascendiendo entre edificios y el despliegue de medios causaron cierta alarma en la zona, aunque pronto se confirmó que no había personas heridas ni viviendas afectadas.
El fuego se concentró en la cabina y la parte trasera del vehículo, y fue extinguido sin complicaciones mayores. El conductor del camión logró abandonar el vehículo por su propio pie, y no necesitó atención médica.

Un segundo incendio, esta vez en plena autovía
Pocas horas después, los Bombers fueron requeridos nuevamente tras detectarse otro incendio en la comarca. Esta vez se trató de un camión que circulaba por la autovía A-2, uno de los principales ejes viarios del interior de Catalunya. El incidente ocurrió mientras el vehículo transitaba por un tramo con tráfico moderado.
Las llamas se extendieron rápidamente, afectando buena parte del motor y del remolque, lo que obligó a detener completamente el tráfico en uno de los carriles en dirección Lleida. La intervención de los equipos de emergencia fue clave para controlar la situación y evitar una cadena de accidentes en plena vía rápida.
El conductor también salió ileso y no fue necesario evacuar a otros vehículos. Tras la intervención, los servicios de limpieza trabajaron en la retirada de los restos del camión y en la revisión del pavimento para restablecer el tránsito con total seguridad.
Reacción eficiente y sin consecuencias humanas
A pesar de tratarse de dos intervenciones prácticamente consecutivas, la coordinación de los Bombers y los cuerpos de seguridad fue ejemplar. Ninguno de los incendios provocó heridos ni daños estructurales a terceros, lo que permite hablar de una resolución rápida y eficaz.
Los responsables de los operativos recuerdan la importancia de alertar rápidamente a los servicios de emergencia ante cualquier indicio de fuego en un vehículo. Muchas veces, un aviso a tiempo permite evitar daños más graves.
El lugar de los hechos
Ambos incendios se han producido en la comarca de l’Anoia, en el interior de la provincia de Barcelona. El primero ocurrió en el núcleo urbano de Igualada, cuando un camión de basura ardió en plena calle. El segundo tuvo lugar en la autovía A-2 a su paso por el municipio de Òdena, también dentro de la misma comarca.
Aunque no hubo víctimas, los dos episodios han servido como recordatorio de la vulnerabilidad de este tipo de vehículos, especialmente en entornos urbanos y en carreteras de alta circulación.