Están siendo días meteorológicamente complicados en Catalunya, con fenómenos adversos que están causando graves estragos en infraestructuras y carreteras. La combinación de nieve y viento está poniendo en jaque tanto a los servicios de emergencia como a la población y han impedido disfrutar del todo del puente.
La carretera N-260, una de las principales vías en el Alt Empordà, ha sido cortada a la altura de Portbou debido a las fuertes rachas de viento a primer ahora de este lunes. Este cierre se extiende hasta la conexión con la RD-914 en Francia, agravando aún más la situación de la movilidad en la región. Según informa el Servei Català de Trànsit, la medida busca evitar accidentes, ya que las condiciones hacen extremadamente peligroso circular por estas vías.
Además del viento, la nieve sigue siendo un factor determinante en el cierre de otras carreteras. La C-28 permanece clausurada en el Port de la Bonaigua por riesgo de aludes. Otras vías afectadas incluyen la BV-4024 en el Coll de Pal y la BV-4031 en el Coll de la Creueta. En estas y otras carreteras del Pirineo, es obligatorio el uso de cadenas.
El viento, con rachas superiores a los 120 km/h en algunas zonas, ha sido responsable de múltiples incidentes en las últimas horas. Los Bomberos de Catalunya han recibido hasta 16 llamadas de emergencia, entre ellas por árboles caídos y tejados dañados. Además, el viento ha favorecido la propagación de dos incendios que han complicado las tareas de extinción.
El viento amenaza
La alerta Ventcat sigue activa durante la jornada de hoy lunes, especialmente en el tercio sur, el Empordà y las cotas altas del Pirineo. Las previsiones indican que el viento alcanzará velocidades de hasta 21,8 m/s en algunas zonas, aunque se espera que disminuya a partir de la tarde. Sin embargo, la situación durante las primeras horas del día sigue siendo crítica y es importante para la población estar atentos a la evolución del tiempo y a las recomendaciones de las autoridades.
Los expertos insisten en la importancia de evitar desplazamientos innecesarios y extremar las precauciones en las carreteras. Conducir con viento fuerte puede ser extremadamente peligroso, especialmente en vehículos ligeros o de gran volumen, que son más vulnerables a las ráfagas.
Decisiones preventivas como el cierre de carreteras son esenciales para garantizar la seguridad de los ciudadanos. Aunque estas medidas pueden causar incomodidades, son necesarias para evitar situaciones de riesgo mayores. Las autoridades mantienen la vigilancia activa y recomiendan estar atentos a las actualizaciones meteorológicas.