Tráfico denso en la C-32

Alerta en la C-32 tras un accidente: Carriles cortados y largas colas

La evolución ha empeorado con el paso de los minutos

La mañana de este lunes se ha visto envuelta en un importante caos circulatorio a lo largo de la C-32, en sentido Barcelona, como consecuencia de un accidente registrado a la altura de Alella (Maresme). La incidencia, según informan desde el Servei Català de Trànsit, ha obligado a cortar un carril de la autopista, causando retenciones que inicialmente se situaban en un tramo de cuatro kilómetros desde Teià, pero que han aumentado con rapidez a lo largo de la hora siguiente. A medida que avanzaba la mañana, las colas han acabado extendiéndose hasta Vilassar de Dalt, cubriendo aproximadamente siete kilómetros de congestión.

El suceso, del que aún no se han divulgado detalles sobre su gravedad o la presencia de heridos, se produjo en plena hora punta, cuando un gran número de conductores se dirigía a sus puestos de trabajo o centros de estudio. La combinación de elevado tránsito y el corte de un carril han generado un auténtico “efecto embudo” que ha colapsado la autopista, alcanzando tiempos de demora considerables para quienes circulaban en dirección Barcelona.

Evolución preocupante

Según los tuits emitidos por la cuenta oficial de Trànsit, el primer aviso indicaba que, poco después de las ocho de la mañana, se había procedido a cortar un carril en sentido Barcelona a raíz de un accidente en Alella. En ese momento, se hablaba de un tramo de congestión cercano a cuatro kilómetros, con paradas intermitentes y velocidades muy bajas. El mensaje incluía imágenes captadas por las cámaras de la autopista, mostrando una sucesión de turismos y camiones detenidos o avanzando a paso de tortuga.

Apenas media hora después, los mismos canales de información señalaban que el problema se había agravado: la cola ya se extendía hasta Vilassar de Dalt, cubriendo siete kilómetros de atasco en total. De este modo, el desplazamiento de miles de conductores empeoraba a ojos vista, mientras se mantenía la restricción de un carril en sentido Barcelona. La principal petición a los automovilistas consistía en mantener la paciencia, respetar la distancia de seguridad y seguir las indicaciones de los paneles luminosos, así como de los agentes de los Mossos d’Esquadra o la Guardia Urbana si se desplazaban a regular el tráfico.

El incidente ha tenido un efecto dominó en las vías colindantes, pues numerosos conductores han optado por salir de la C-32 y buscar rutas alternativas a través de carreteras secundarias o la N-II. Este desvío improvisado se ha traducido en un aumento del tráfico en los accesos a municipios como Tiana, Montgat o Masnou, donde se han registrado también retenciones puntuales. Aun así, Trànsit recomienda a quienes puedan retrasar o adelantar su viaje que lo hagan, con el fin de evitar verse atrapados en un cuello de botella que, según las previsiones, podría persistir durante buena parte de la mañana.

En la última actualización se asegura que los coches ya han sido retirados al arcén, por lo que en los próximos minutos debería empezar a normalizarse, poco a poco, la situación. Por el momento, sin embargo, son ahora 8 los kilómetros en los que se distribuye la congestión.