La mañana de este martes ha resultado especialmente complicada para los conductores que transitaban por las vías próximas a Sant Vicenç dels Horts, en el área metropolitana de Barcelona. Un camión con remolque se ha averiado y ha quedado situado en un viaducto que enlaza la A-2 con la B-23, generando retenciones y largas colas en hasta tres carreteras simultáneamente: la BV-2002, la BV-2005 y la propia A-2, entre Pallejà y Sant Vicenç dels Horts, en sentido Barcelona.
El Servei Català de Trànsit ha informado a través de sus canales oficiales de la incidencia, detallando que el remolque del camión ha quedado parcialmente desenganchado sobre el viaducto, lo que ha obligado a interrumpir el tráfico en uno de los carriles y a establecer diversas medidas de seguridad para evitar un accidente mayor. Al parecer, la avería se ha producido en un momento de gran densidad de tráfico, lo que ha agravado la situación de colapso.
Afectaciones en la A-2 y vías secundarias
Uno de los puntos críticos se sitúa en la A-2, donde la avería ha afectado sobre todo a los vehículos que se desplazan en sentido Barcelona. Según las primeras estimaciones, algunos conductores se han visto atrapados en colas de varios kilómetros entre Pallejà y Sant Vicenç dels Horts. Las retenciones han sido intermitentes, con parones y arranques que se sucedían en tramos cortos, dificultando la conducción y aumentando la tensión de los implicados.
De forma paralela, la incidencia ha tenido un efecto dominó en las vías secundarias cercanas: la BV-2002 y la BV-2005, ambas en el término municipal de Sant Vicenç dels Horts, donde se han detectado también colas importantes. Muchos conductores que intentaban evitar la congestión de la A-2 han optado por tomar rutas alternativas, incrementando el flujo de tráfico en carreteras menos preparadas para soportar una gran cantidad de vehículos en hora punta.
Hasta la zona se han desplazado dotaciones de los Mossos d’Esquadra y de los equipos de mantenimiento de carreteras, con el objetivo de retirar el camión y su remolque lo antes posible. Fuentes oficiales señalan que se está valorando la necesidad de una grúa de gran capacidad o un dispositivo especial para asegurar que el remolque no se desplace de forma brusca durante las maniobras de rescate. Además, se ha extremado la precaución para evitar derrames de combustible u otros materiales potencialmente peligrosos que pudieran agravar la situación.
Aunque no se han confirmado daños personales, la avería ha causado notables perjuicios en la movilidad de la región. Las autoridades recomiendan a los usuarios que se vean obligados a circular por la zona que consulten los canales de información de Trànsit antes de iniciar su viaje, con el fin de conocer el estado actualizado de las carreteras. De esta forma, podrán planificar rutas alternativas que eviten los principales focos de congestión. Para quienes se desplacen desde zonas como Martorell o Pallejà hacia Barcelona, se sugiere considerar el uso de la autopista AP-7 o la B-24.