La tranquilidad habitual del tráfico rodado se ha visto interrumpida en plena hora punta de esta tarde, provocando una situación de tensión y espera para centenares de conductores. Un incidente, aparentemente menor en su inicio, ha acabado por colapsar una de las principales vías de acceso a Barcelona, generando largas retenciones y molestias significativas para quienes circulaban por la zona en ese momento.
Según información oficial proporcionada por el Servei Català de Trànsit, pasadas las cuatro de la tarde, dos turismos colisionaron en la carretera C-58 a la altura de Montcada i Reixac, dirección Barcelona.
Aunque la colisión no ha dejado heridos graves, sí ha tenido como consecuencia inmediata la interrupción parcial del tráfico en esta transitada vía de comunicación entre el Vallès y Barcelona.
El carril central de la carretera tuvo que ser cerrado por los equipos de emergencia que rápidamente se desplazaron al lugar de los hechos. En poco tiempo, la situación derivó en colas que llegaron a superar los tres kilómetros de longitud. Las cámaras de vigilancia de tránsito captaron imágenes del atasco, que muestran claramente cómo la vía estaba completamente saturada con centenares de vehículos prácticamente detenidos.
Intervención rápida de los servicios de emergencia
Pese al incidente, cabe destacar la rapidez con la que los servicios de emergencia se desplazaron a la zona afectada, una reacción ágil que permitió controlar rápidamente la situación, evitando que el siniestro derivara en consecuencias más graves. Efectivos de Mossos d'Esquadra y personal de asistencia vial colaboraron para garantizar la seguridad de los implicados y restablecer el tráfico lo antes posible.
Las tareas de retirada de los vehículos accidentados se iniciaron con celeridad, aunque durante varios minutos los conductores debieron armarse de paciencia debido al lento avance del tráfico rodado. El tráfico quedó condicionado por la presencia del personal de emergencias y por los trabajos necesarios para liberar completamente la vía.
Una vía de frecuente colapso
No es la primera vez que un incidente en esta vía causa grandes retenciones. La C-58 es una arteria clave para la movilidad diaria de miles de vehículos, especialmente durante las horas punta entre semana, cuando cualquier pequeña interrupción en su funcionamiento puede causar enormes colapsos.
Los conductores que habitualmente circulan por esta carretera conocen bien lo vulnerable que puede ser esta ruta ante cualquier incidente menor. En este caso, el accidente, aunque de escasa gravedad, se tradujo en un impacto directo en el tiempo de desplazamiento de centenares de personas, muchas de ellas dirigiéndose a Barcelona por motivos laborales.