El final de 2024 está a la vuelta de la esquina, y con él llegan las tradicionales celebraciones que tantos esperan para despedir el año por todo lo alto. Sin embargo, la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) ha activado todas las alarmas: se prevé la llegada de una DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos) que podría truncar los planes de quienes esperan un fin de año tranquilo y sin contratiempos. Los expertos no ocultan su preocupación ante un cambio en el tiempo que, de cumplirse los pronósticos, podría marcar el punto y final de un año ya de por sí cargado de variaciones meteorológicas inusuales.
Durante los últimos días, se ha registrado un comportamiento climático que alerta a los especialistas. Atrás queda la relativa estabilidad que aportó el anticiclón en semanas anteriores: con la cercanía de la Nochevieja, las cosas dan un giro y nos sitúan en un escenario en el que, tal y como adelanta la AEMET, la inestabilidad podría ser la protagonista de las horas finales del 2024.
No es la primera vez que una DANA sorprende a la península, pero no por ello deja de ser motivo de inquietud. En un momento tan señalado, este fenómeno meteorológico amenaza con provocar lluvias intensas allí donde menos se las espera, poniendo en jaque desplazamientos, celebraciones y los habituales encuentros familiares.
Un cambio de ciclo que podría marcar la segunda gran fiesta del año
Los analistas coinciden en que este último tramo del año viene cargado de incertidumbre. Nos enfrentamos, según la AEMET, a una situación climatológica con una gran capacidad de alterar la dinámica habitual de estas fechas festivas. Con la DANA adentrándose en nuestro territorio, se dibuja un panorama en el que se combinarán chubascos, tormentas y ráfagas de viento en distintas regiones.
Los cielos despejados van a ser menos frecuentes de lo habitual, y la visión optimista que muchos tenían sobre una Nochevieja libre de sobresaltos se atenúa ante los avisos oficiales. El termómetro, por su parte, puede registrar altibajos notables, con descensos en las máximas y heladas moderadas en zonas de interior. Todo ello se traduce en la necesidad de tomar precauciones adicionales si vamos a emprender viajes o simplemente pretendemos disfrutar al aire libre.
Éstas son las zonas más afectadas por la DANA
La AEMET ha insistido en que esta DANA no impactará por igual en todo el territorio, sino que se concentrará especialmente en algunas zonas peninsulares y en Baleares. Es crucial identificar los lugares donde la probabilidad de lluvias intensas y tormentas será mayor:
Litorales del este y sureste peninsular: Se esperan chubascos fuertes y persistentes, con riesgo de tormentas eléctricas. Se recomienda especial precaución en desplazamientos por carretera. Rachas de viento que podrían incrementar la sensación de frío.
Islas Pitiusas (Ibiza y Formentera): Aviso de lluvias que podrían presentarse de forma intensa en algunos momentos. Posibles episodios de viento moderado que obligarán a extremar las precauciones en el transporte marítimo.
Áreas de la meseta Norte y depresiones del nordeste: Nieblas densas y persistentes, lo cual dificultará la visibilidad en carretera. Riesgo de heladas moderadas, especialmente en las horas nocturnas y primeras horas de la mañana.
No todo el territorio peninsular se verá bajo la influencia directa de este fenómeno, pero el posicionamiento de la DANA al sur y la entrada de humedad desde el Mediterráneo podrían extender la inestabilidad más allá de las áreas mencionadas, sobre todo en caso de que el sistema se mueva de forma inesperada.
Despedir el 2024 con precaución
Este año, dominado en sus últimas semanas por la incertidumbre meteorológica, finaliza con un aviso de la AEMET que conviene no pasar por alto. La DANA que se cierne sobre nuestras cabezas promete un fin de año pasado por agua en muchas regiones, lo cual obliga a modificar o reajustar planes para la fiesta de Nochevieja.
No obstante, con la información adecuada y un poco de previsión, es posible disfrutar de la magia de la segunda gran fiesta del año sin correr riesgos innecesarios. Prepararse ante la llegada de lluvias intensas, nieblas espesas y rachas de viento nos permitirá cerrar 2024 de forma segura y dar la bienvenida a un 2025 que, de momento, se presenta como un ciclo lleno de retos, sorpresas y, por lo que parece, con un protagonismo especial de la meteorología. Si algo hemos aprendido este año, es que conviene mirar siempre hacia el cielo y tener a mano el paraguas.