Quien determinó que sólo habían siete maravillas en el mundo no había probado el queso todavía. Este derivado lácteo es un auténtico deleite para gran parte de la sociedad, ubicándose entre uno de los alimentos más consumidos. Sorprendentemente, España, un país generalmente muy aficionado al queso, 'tan solo' consumimos entre 8 y 9 kilos al año por persona, mientras la media europea se ubica en los 17,5 kg.
Los grandes aficionados de queso siempre analizan con cautela las características de todos estos productos para invertir su dinero en el mejor. Y muchas veces conocemos a este derivado lácteo dependiendo de donde han sido producidos. Eso dictamina gran parte de su calidad.
Y, a partir de ahora, ya podremos decir de forma oficial que uno de los mejores quesos de todo el Viejo Continente se vende en Catalunya. Así lo ha determinado la propia Unión Europea a través de su Indicación Geográfica Protegida.
Europa se deleita con el queso catalán
La indicación geográfica protegida (IGP) es uno de los regímenes de calidad en la Unión Europea que identifica un producto alimentario que es originario de un lugar determinado, una región o un país, tiene una calidad determinada, una reputación u otra característica que pueda ser atribuida a su origen. Además, como mínimo una de sus fases de producción, transformación o elaboración debe haberse llevado a cabo en esta zona geográfica definida.
El Departament d'Acció Climàtica, Alimentació i Agenda Rural a petición de la Associació de ramaders i productors de formatge artesà han sido los que han propuesto a la UE poder recibir esta distinción con el objetivo de dinamizar y valorizar este delicioso queso.
Eso sí, no cualquier queso producido en la Garrotxa recibirá el sello de la IGP. Para poder optar a él, deberán ser elaborados con leche de cabra y con una corteza recubierta por un hongo gris y azulado. Además, no podrá tener grietas y tendrá que tener una forma cilíndrica con los bordes redondeados. La maduración del queso tendrá que ser adecuado para tener un producto de calidad pero la costra cuenta con notas olfativas de humedad de bodega.
Este es el undécimo producto catalán que recibirá este distintivo. Otros de los que lo han obtenido son, entre otros, el vino Priorat, el aceite de Siurana, los Fesols de Santa Pau, el arroz del Delta del Ebro, el Queso Urgell y Cerdanya, la avellana de Reus, la pera de Lleida, la 'mongeta' del Ganxet.