El desayuno, según el nutricionista Luis Zamora, es tan importante como cualquier otra comida del día. Sin embargo, muchos cometemos el error de optar por productos ultraprocesados, como galletas, croissants y bizcochos, que son comunes en los desayunos. Estos alimentos, llenos de azúcares y grasas saturadas, pueden generar picos de glucosa en sangre y no ofrecen los nutrientes que nuestro cuerpo necesita, provocando, a largo plazo, efectos negativos como aumento de peso, fatiga y falta de concentración.
Para Zamora, el desayuno ideal debe aportar vitaminas, minerales y fibra, comenzando con fruta fresca en lugar de zumos. El motivo es que la fruta entera tiene un mejor impacto en los niveles de azúcar en sangre, ya que su fibra ralentiza la absorción de los azúcares. Además, el desayuno perfecto debe incluir proteínas, ya que, según los últimos estudios, esta comida es clave en la "ventana anabólica", el momento del día en que el cuerpo puede crear más músculo, algo importante no solo para los jóvenes, sino también para las personas mayores y de cualquier edad.
Zamora destaca la importancia de mantener el músculo a medida que envejecemos, y esto se logra mediante una dieta que incluya alimentos ricos en proteínas. Leche, huevos, legumbres, carnes, pescados o frutos secos son excelentes fuentes de proteínas que se pueden incorporar al desayuno de manera saludable. Este tipo de alimentos no solo ayuda a crear y mantener músculo, sino que también aporta energía duradera a lo largo del día.
No a los alimentos de cumpleaños
En cuanto a los hidratos de carbono, Zamora recomienda optar por los carbohidratos complejos, como el pan integral 100%, que ofrecen una liberación de energía más estable en comparación con los carbohidratos refinados. Acompañar el desayuno con una grasa saludable, como un poco de aguacate o un chorrito de aceite de oliva virgen extra, es igualmente beneficioso para el cuerpo.
El experto señala que un error común es incluir en el desayuno alimentos como croissants, galletas o bizcochos, los cuales deberían ser eliminados del día a día. Debería serlo, de hecho, dice Luis Zamora, "todo lo que nos recuerde a un cumpleaños". Estos productos, aunque comunes en muchas mesas, están cargados de azúcares y grasas perjudiciales que no ofrecen nutrientes útiles y solo "sabotean" nuestro día. Tanto los productos ultraprocesados comprados como aquellos hechos en casa deben evitarse, ya que no proporcionan el equilibrio nutricional necesario.
Zamora recomienda también adoptar una rutina de actividad física regular y exposición a la luz natural, ya que ambos factores contribuyen a mejorar el estado de ánimo y los niveles de energía. Además, recalca la importancia de mantener un horario de sueño regular, algo fundamental para que el cuerpo funcione correctamente.