En un contexto de cambios constantes en el sector bancario, donde la digitalización avanza a pasos agigantados y la relación con los clientes se transforma casi a diario, BBVA ha dado un paso inesperado. Lo ha hecho a través de un comunicado oficial que ha generado una oleada de reacciones entre usuarios de toda España.
La noticia, aunque presentada con cierta discreción, afecta directamente a millones de personas. Y no solo a los clientes actuales del banco, sino también a todos aquellos que se plantean cambiar de entidad o que exigen una mayor calidad tecnológica en los servicios financieros.
Un banco que acelera su transformación digital
Desde hace meses, BBVA ha estado rediseñando su estructura tecnológica con el objetivo de convertirse en una de las entidades más innovadoras del mundo. Sus avances han sido tan significativos que recientemente ha recibido el reconocimiento internacional de The Banker, una de las publicaciones más prestigiosas del sector.

Entre sus logros, destaca el acuerdo con OpenAI, que le ha permitido integrar inteligencia artificial generativa en procesos internos, atención al cliente y desarrollo de producto. Pero eso no es todo.
También ha logrado modernizar completamente su sistema de gestión de datos, centralizando operaciones en la nube y optimizando recursos gracias a ADA, una nueva plataforma capaz de gestionar 4 petabytes diarios y más de 40.000 procesos en simultáneo.

Una apuesta firme por la IA y la sostenibilidad
La innovación no se limita a la infraestructura. BBVA ha extendido su AI Factory a países como México y Turquía, y ha lanzado una banca 100% digital en Italia que ha superado previsiones en tiempo récord.
Todo esto tiene un propósito claro: mejorar la experiencia del usuario. Y es ahí donde se han centrado los últimos esfuerzos. El asistente virtual Blue, integrado en la app, ya usa inteligencia artificial generativa para mantener conversaciones más naturales, resolver dudas en segundos y realizar operaciones sin necesidad de hablar con un humano.
Además, la entidad ha lanzado herramientas para el ahorro energético, recomendaciones personalizadas en su plataforma móvil y un sistema de pagos instantáneos para empresas que permite enviar cientos de transferencias en segundos, con seguridad garantizada.
BBVA ha dejado claro que su objetivo es ser útil en la vida diaria de sus clientes. Por eso ha potenciado tanto el entorno digital como los servicios presenciales, sin descuidar a quienes no están totalmente familiarizados. Los avances buscan romper barreras de acceso y permitir que cualquier usuario pueda acceder a sus finanzas de forma sencilla.
Pero lo más importante llegó con un comunicado inesperado
En dicho comunicado, BBVA confirma públicamente su compromiso a largo plazo con la inteligencia artificial y la modernización del sistema bancario, declarando que todas estas innovaciones tecnológicas no conllevarán un aumento de comisiones para sus clientes. Al contrario, muchos de estos servicios se mantendrán gratuitos.
Una declaración firme que llega en un momento clave, cuando otros bancos recortan servicios o aumentan costes. BBVA, en cambio, apuesta por más tecnología, más accesibilidad y mejores condiciones. Así lo han entendido millones de clientes, que aplauden una decisión que los sitúa en el centro de la transformación bancaria.