En 2025, el panorama económico europeo vive una aceleración sin precedentes en la digitalización de las empresas. Según datos recientes, el 68 % de las compañías ya usa tecnología digital para optimizar procesos internos y mejorar la relación con clientes y proveedores. En este contexto, los bancos juegan un papel fundamental. Su misión ya no es solo financiar, sino convertirse en socios estratégicos que aportan valor añadido y ayudan a las empresas a competir en un mercado cada vez más globalizado y exigente.
Las entidades que no innovan corren el riesgo de quedarse atrás. Los desafíos de liquidez, seguridad y gestión internacional han cambiado. Las empresas, especialmente las pymes, demandan herramientas que les permitan tener un mayor control y anticipación en su operativa diaria. En este entorno, el Banco Santander ha decidido ir un paso más allá.
Un nuevo ecosistema digital para empresas: gestión, pagos y seguridad en tiempo real
El Banco Santander ha rediseñado su Banca Digital de Empresas como una plataforma multifunción. El objetivo es claro: facilitar la vida a las empresas. Ahora, los clientes empresariales pueden acceder a un entorno digital que simplifica tareas clave como la gestión del circulante, los pagos a proveedores y la consulta de líneas de financiación.
El acceso a la información es inmediato y transparente. Gracias a cuadros de mando en tiempo real, las empresas pueden controlar facturas, vencimientos, y estado de las operaciones de confirming y factoring. Esto les permite anticipar problemas de liquidez, renegociar condiciones y mejorar la toma de decisiones.
Un ejemplo práctico: una empresa con proveedores internacionales puede saber en segundos cuándo tendrá que afrontar pagos importantes, y así reorganizar su tesorería antes de que surjan complicaciones.
En el ámbito de los pagos, Santander ha dado un salto con herramientas como ‘Get tap on phone’, que convierte cualquier móvil en un terminal de cobro. Esto ha cambiado la operativa de muchos pequeños negocios, eliminando costes y permitiendo ventas en cualquier lugar. El servicio Pago Ágil permite financiar pagos a proveedores incluso después del vencimiento de la factura. Esta flexibilidad es clave en sectores donde el flujo de caja marca la diferencia entre crecer o estancarse.
La seguridad es otro punto central. El banco ha implementado el sistema biométrico Santander Key, que facilita el acceso y la validación de operaciones sin necesidad de contraseñas. Todo se hace con huella dactilar o reconocimiento facial, lo que reduce fraudes y simplifica la experiencia.
Soluciones globales: internacionalización y gestión avanzada de empleados
Santander no se ha quedado solo en el mercado local. La unidad Santander Multinacionales ofrece a las empresas herramientas digitales para gestionar su tesorería a nivel global.
La solución Cash Nexus permite visualizar, en un solo panel, la situación financiera de filiales en distintos países. Además, las empresas pueden realizar seguimientos de mercancías y pagos internacionales desde la misma plataforma, algo impensable hace solo unos años.
Otra innovación destacada es el uso de avales digitales. Estos documentos electrónicos simplifican y aceleran las operaciones internacionales, eliminando tiempos muertos y errores burocráticos.
En el área de recursos humanos, el Plan Empresa Empleado de Santander está ayudando a pymes y grandes empresas a digitalizar la gestión del talento. Herramientas como Factorial y Cobee permiten gestionar nóminas, beneficios y anticipos de sueldo de forma flexible y digital, ayudando a atraer y retener talento en un momento donde la competencia por los mejores profesionales es intensa.
Una propuesta que redefine la banca para empresas
La estrategia de Banco Santander es ambiciosa. No solo busca digitalizar procesos, sino acompañar a las empresas en cada paso de su desarrollo, dentro y fuera de España. Al apostar por tecnología útil, segura y flexible, la entidad se posiciona como un socio estratégico. Las empresas encuentran en Santander no solo un proveedor financiero, sino un aliado capaz de impulsar su crecimiento en la nueva economía digital.